Una familia de Maryland ha acusado al Hospital Nacional Infantil de alentar a su hijo adolescente autista a identificarse como “chica”. El niño fue retirado del cuidado de su familia debido a que ésta se negó a “validar” su transición, y ha sido llevado a la casa de la capellana no binaria del Hospital, que tiene conexiones con el subsecretario de Salud, Rachel Levine.
La demanda, presentada en marzo por la pareja de Maryland John Doe II y su esposa, afirma que su hijo autista de 16 años ingresó en el hospital tras un intento de suicidio en noviembre de 2021. Poco después de su ingreso, los progenitores alegan que el personal del hospital comenzó a insistir en que su hijo era transgénero, a pesar de que el niño nunca había cuestionado su identidad de género antes de su estancia en el hospital.
Según un comunicado de prensa emitido por Partners for Ethical Care, la demanda afirma que el hospital “puso en marcha intencionalmente un … programa para identificar, criticar y luego reprender la religión profesada por la familia… [y] exigir expresamente a los progenitores que se conviertan al ‘nuevo cristianismo’ participando en sesiones de conversión religiosa con la capellana [del hospital], Lavender Kelley, seleccionada personalmente y que no compartía creencias con la familia Doe”.
Kelley, una mujer que se identifica como transgénero no binaria, ha publicado en repetidas ocasiones su apoyo a la transición médica de menores en contra de los deseos de sus familias.
“Estoy tan agotada de ver morir a criaturas porque sus familias no entienden la ciencia del género o la psicología de la coerción o el daño de la religión como arma. Y el ver que el gobierno no sólo no ayuda, sino que incumple abiertamente, significa que habrá más suicidios y una profunda angustia mental”, escribió en Facebook en marzo de 2022, apenas dos meses después de que se le dijera a la familia en los procedimientos judiciales del Servicio de Protección de Menores que a su hijo sólo se le permitiría volver a casa si afirmaban su nueva identidad trans y dejaban de leer “determinados pasajes” de la Biblia en casa.
“Incluso si no estás de acuerdo con las terapias de afirmación de género, por favor, por favor, ten en cuenta que evitan suicidios y dan a las criaturas espacio para crecer y desarrollar su auténtica identidad”, continúa en la publicación. “Nada de lo que se hace en las terapias de afirmación de género para criaturas y adolescentes es 100% irreversable [sic] si cambian de opinión. Les estamos dando tiempo para que entiendan las complejidades del género, pero de una manera que promueve el crecimiento psicológico por el camino”, continuó Kelley.
A pesar de insistir en lo contrario, las terapias de “afirmación de género”, como el tratamiento hormonal, tienen efectos permanentes.
Antes de ser entregado directamente a Kelley, el niño había sido llevado a la casa de una madre de acogida, que supuestamente era una buena amiga de Kelley.
La demanda afirma que la “madre de acogida” tenía un cargo previo por agresión en Maryland y comenzó a “explotar” al adolescente haciéndolo posar como chica en fotos de Instagram, a pesar de que supuestamente escribió que él “no quería ser una mujer”.
Inquietantemente, después de someterse a pruebas de detección de enfermedades de transmisión sexual en el verano de 2022, el niño fue hospitalizado una vez más por un intento de suicidio.
La demanda agrega además que la “madre de acogida” murió repentinamente y, como consecuencia, el adolescente fue puesto al cuidado de Kelly, la capellana del hospital, donde los padres afirman que todavía reside hasta el día de hoy, a pesar de haber cumplido 18 años en marzo del año pasado.
En otra publicación de Facebook de junio de 2023, durante el tiempo en el que la demanda alega que el niño vivía con Kelly, la capellana y su pareja aparecen en una foto en un evento en la Embajada de Israel en Washington DC, con el subsecretario de Sanidad, el almirante travesti Rachel Levine.
Levine ha sido uno de los más firmes defensores de la transición médica infantil. “La atención de afirmación de género salva vidas, es médicamente necesaria, adecuada para la edad y una herramienta fundamental para los proveedores de atención médica”, dijo Levine en junio de 2022. “Como pediatra, cuando se trata de asegurarme de que la infancia esté sana y feliz, sé lo importante que puede ser una atención que afirme la verdadera identidad de alguien”.
A pesar de que un juez dictaminó en agosto de 2023 que las acusaciones de maltrato presentadas contra los progenitores por el hospital carecían de fundamento, el niño nunca les fue devuelto.
“Este es el caso más demencial que he tenido”, dijo el abogado de la familia, Amos Jones, en marzo. “No sé por qué hay gente que piensa que esto tiene sentido. Pero supongo que ahora mucha gente está de acuerdo con esto en Washington D.C. … Hay una manera sensible de acoger y atender a las familias que cuidan a una criatura con problemas de identidad. En lugar de ello, este hospital decidió hacer caso omiso de los derechos de los progenitores, y la opresión ha durado un período que ahora abarca cuatro años”.
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