Un entrenador deportivo que se dice transgénero ha dimitido discretamente de su puesto en un instituto de Gettysburg, Pensilvania, dejando a algunos miembros de la comunidad buscando respuestas. Reduxx ha sabido ahora que Sasha Yates fue descubierto protagonizando pornografía mientras fumaba metanfetamina, y ha sido denunciado al programa estatal de servicios de protección infantil por desnudarse frente a chicas adolescentes en los vestuarios femeninos.
Como ya informó Reduxx el año pasado (artículo en español), Yates había sido contratado inicialmente por el Distrito Escolar del Área de Gettysburg en 2018 cuando aún se identificaba como hombre, pero en 2022, comenzó a usar el nombre de Sasha después de declarar que era transgénero. Yates tiene tres hijos, dos de los cuales parecen vivir en el Reino Unido con su madre, y una hija pequeña que vive con él en Pensilvania.
En el otoño de 2022, poco después de que Yates comenzara a “identificarse” como mujer y a usar las instalaciones para mujeres, se desnudó hasta quedarse “en sujetador y bragas” en el vestuario femenino donde se cambiaban las adolescentes del equipo de fútbol.
Cuando estaba en el vestuario, Yates preguntaba a las jóvenes sobre sus ciclos menstruales y “qué tipo de bragas les gustaba ponerse”. Las chicas informaron más tarde que pudieron ver que Yates todavía seguía intacto, lo que indica que su pene era visible.
El incidente saltó a la atención pública después de que Michelle Smyers, miembro del consejo del Distrito Escolar del Área de Gettysburg, revisara documentos internos relacionados con el uso de los baños y vestuarios de chicas por parte de Yates.
En respuesta a la protesta pública, el distrito contrató discretamente a un abogado para investigar las acusaciones de que Yates se había exhibido ante las estudiantes. El abogado, Christopher Harris, determinó que las acusaciones eran infundadas, a pesar de que nunca entrevistó a las chicas que habían informado haber visto los genitales de Yates. En un extraño giro de los acontecimientos, Harris fue detenido recientemente acusado de posesión y distribución de abuso sexual infantil grabado.
Los informes iniciales sobre la conducta de Yates aparecieron justo cuando su contrato con el distrito estaba a punto de renovarse. Y aunque dos de las chicas que habían estado expuestas al comportamiento inapropiado de Yates eran hijas de miembros del consejo escolar, el Distrito votó a favor de renovar su contrato.
Pero el 1 de octubre, las noticias locales de Gettysburg informaron que Yates había dimitido alegando “constantes motivos de salud”.
Reduxx puede revelar ahora que la dimisión de Yates parece haberse producido después de protagonizar pornografía casera, incluyendo un vídeo en el que se le ve fumando metanfetamina en una pipa de cristal.
En declaraciones a Reduxx, Michelle Smyers, miembro del consejo, explicó que la noche del 29 de septiembre recibió un correo electrónico de un “progenitor preocupado” con dos archivos adjuntos. Ambos eran videos pornográficos caseros de Yates participando en conductas sexuales perturbadoras.
“Un video muestra a [Yates] sentado con una camisa ajustada de mujer, pero sin nada en la parte de abajo, fumando lo que pensé que era una pipa de crack. Pero era metanfetamina. ¿Cómo lo sé? Porque él mismo dice: ‘¿Soy una buena zorra de metanfetamina?’ en el video”, explica Smyers. “Después de ver eso, abrí el siguiente video. Y allí estaba él, con un sujetador puesto, inclinado sobre un lavabo o algo así, con un hombre negro con una capucha sobre la cabeza detrás de él, practicándole sexo anal… Estaba mirando directamente a la cámara todo el tiempo”.
Horrorizada, Smyers se puso inmediatamente en contacto con el jefe de policía del distrito escolar y le informó que había recibido los videos. A continuación llamó al presidente del consejo escolar, quien le aseguró que Yates “se iría” al día siguiente.
Lo inquietante es que parece que Yates se había enterado de que Smyers había recibido los vídeos y se puso en contacto con ella por SMS al día siguiente para asegurarle que presentaría su dimisión. Smyers dice que creía que se trataba de un gesto para que «guardara silencio» sobre los vídeos.
Pero Smyers llevó sus preocupaciones a esferas más altas y presentó una queja formal ante la Child Line de Pensilvania, la autoridad estatal de protección de menores.
“Les dije quién era y a quién quería denunciar y les conté toda la historia, incluidos los incidentes de los vestuarios y los baños sobre los que deberían haber recibido un informe hace dos años, pero que nunca recibieron”, dice Smyers, refiriéndose a los incidentes en los que Yates se desnudó delante de chicas adolescentes en los vestuarios. “Creo que nadie de mi distrito hizo nunca esa llamada, a pesar de que son informadores obligatorios, así que la hice yo”.
Smyers dice que Child Line hizo ayer un seguimiento de la denuncia y le pidió que les enviara los videos de Yates fumando metanfetamina. “De hecho, le pedí a la mujer que me prometiera que no me iba a meter en problemas por reenviarlos, porque eso es básicamente difundir pornografía”, dice.
Smyers, que lleva varios años luchando contra la contratación de Yates en el distrito, dice que la situación es “algo” reivindicativa.
“Realmente la vindicación pertenece a esas chicas. A las que nadie escuchó ni de las que nadie se preocupó lo suficiente como para creerlas o sentir que importaban”, dice Smyers.
“Dije todo el tiempo que él no era la persona que la gente creía estar defendiendo”, continúa. “Este hombre sabía lo que estaba haciendo en esos vestuarios. Supuestamente, hizo comentarios sobre ser lesbiana. Se sentaba en los banquillos de los partidos de fútbol mirando a menores. Aparecía en obras de teatro y musicales e intentaba poner el careto en las fotos con los actores. Lo sé porque mi hijo participaba en las obras de teatro y en los musicales. Siempre había algo sospechoso. Pero, aun así, era yo era la intolerante”.
A pesar de que el distrito escolar ahora está al tanto de la conducta de Yates, Smyers no cree que vaya a ofrecer disculpas.
“No, no dirán una palabra. Probablemente esperan que yo no diga nada, y si lo hago, me regañarán y dirán que este es un problema de personal y que no debería hablar de ello. Bueno, yo tampoco pedí que me enviaran esos videos, pero ahí estaban. Así que, por lo que a mí respecta, esta es ahora MI historia y la puedo contar”.
Reduxx se puso en contacto con el Distrito Escolar del Área de Gettysburg para obtener comentarios, pero no recibió respuesta a tiempo para la publicación de este artículo.
Reduxx es tu fuente de noticias a favor de los derechos de las mujeres y la protección de la infancia. ¡Somos completamente independientes! Colabora con nuestro proyecto uniéndote a nuestro Patreon, o considera hacer una donación única.