La página web oficial de los Jóvenes Demócratas (JD), el ala juvenil “independiente” del Partido Demócrata Holandés (D66), ha publicado declaraciones en solidaridad con la pedofilia, respaldando la producción de “pornografía infantil virtual” e incluso abogando por enseñar la pedofilia como sexualidad en las escuelas.

Los Jóvenes Demócratas, la “organización juvenil política liberal progresista más encantadora de los Países Bajos”, está en el punto de mira después de que empezaran a circular las actas detalladas de una Asamblea General pasada en las que se decretaba que “la pedofilia es una orientación sexual con la que se nace”. Los Jóvenes Demócratas permiten la afiliación a personas de entre 12 a 30 años y tienen secciones en varias ciudades del país.

La organización juvenil propuso que la pedofilia debería presentarse a los menores como una orientación sexual dentro del plan de estudios de educación sexual en las escuelas, con el fin de proporcionar “comprensión y matices” a esta estigmatizada “identidad”. Durante la reunión, la organización juvenil concluyó que “debería impartirse educación en secundaria sobre la pedofilia como orientación sexual”.

Otra preocupación que señaló el ala juvenil es que “muchos pedófilos consideran el suicidio”, ya que “la pedofilia no es una identidad respetada”. Dado que los pedófilos “lo pasan mal”, la educación puede aportar comprensión y matices con respecto a la pedofilia.

Al igual que muchas otras organizaciones políticas, los Jóvenes Demócratas establecen sus posiciones sobre diversos temas a través de Asambleas Generales en las que los miembros votan sobre las resoluciones. Si bien el decreto inicial sobre pedofilia se hizo en la Asamblea General de junio de 2019, la declaración todavía existe en el sitio web en su página “Diversidad y participación”, entre docenas de otras resoluciones políticas que han adoptado a lo largo de los años.

En la página web de Jóvenes Demócratas aparece actualmente una declaración que implica que los niños y adolescentes pueden identificarse como pedófilos, y la organización afirma que “la falta de una identidad grupal compartida afecta aún más a los adolescentes”.

Durante la misma asamblea general, el grupo de jóvenes también adoptó una resolución sobre materiales de abuso sexual infantil. Los Jóvenes Demócratas señalaron que, con arreglo a la legislación vigente, “Hacer, poseer, ver y distribuir pornografía infantil virtual es un delito”, pero resolvieron apoyar la existencia de “pornografía infantil virtual”, argumentando que “ver pornografía infantil virtual podría ayudar a los pedófilos a conocer sus sentimientos sin dañar a otras personas”.

Además de sus resoluciones políticas sobre la pedofilia, los Jóvenes Demócratas apoyan la promoción de intervenciones médicas eufemísticamente llamadas “atención de afirmación de género”.

En su declaración de Diversidad e Inclusión, los Jóvenes Demócratas afirman que: “Debe estar disponible la atención a la transición para todas las personas con disforia de género. Esta atención debe estar asegurada colectivamente”.

Los Jóvenes Demócratas, en consonancia con los puntos de vista promovidos por el Partido Demócrata general (D66), piden que más hospitales sean “capaces de llevar a cabo tratamientos”, refiriéndose a los llamados procedimientos de “reasignación de sexo”. Piden a su gobierno central que sea “responsable de organizar permisos de transición en todo el país”.

También se establece claramente que las “personas trans” que no se someten a una “transición física” también deben poder “expresar su identidad de género”. Los Jóvenes Demócratas señalan que la “emancipación” de los niños se puede lograr cuando reciben una “educación justa” sobre las personas LGBTQIA +. Esta noción se afirma bajo la premisa de que esta educación sobre las personas “LGBTQIA +” “evitará la discriminación”.

En otra reunión del año pasado, los Jóvenes Demócratas debatieron una ley de protección infantil, la Ley de Seguridad en las Escuelas (SSA). En febrero, el grupo concluyó que el término “seguridad” en la Ley de Seguridad en las Escuelas “también incluye la aceptación y emancipación de los alumnos LGBTI”. Sus enmiendas propuestas a la SSA crean una “base legal para que los … consejos escolares garanticen un entorno seguro en las escuelas”, lo que obligaría a las escuelas a hacer cumplir la “emancipación” de todos los alumnos para expresar abiertamente su sexualidad e “identidad de género” cuando son niños.

Aunque los Jóvenes Demócratas afirman ser “independientes”, están afiliados al partido liberal progresista D66, uno de los principales partidos de los Países Bajos.

El primer representante varón abiertamente trans-identificado en el Parlamento holandés, Lisa Mianti van Ginneken, fue elegido en 2021 como miembro de D66. Actualmente es portavoz de TI, privacidad, derecho de familia y movilidad. También es miembro de varias comisiones parlamentarias, entre ellas las de Educación y Cultura, así como de Ciencia, Finanzas y Gasto Público. Figura como “mujer” en la página web oficial de la Cámara de Representantes.

Van Ginneken fue presidente de Transvisie durante cinco años, de 2017 a 2021. El grupo aboga por detener la pubertad de los niños mediante el uso de fármacos en un proceso que algunos profesionales de la medicina han denominado “castración química“.

Durante su primer año como cargo electo por el Partido Demócrata, 2021, van Ginneken presentó una enmienda a la Ley Transgénero “que haría posible que las personas no binarias tuvieran una “X” en su identificación gubernamental como su designación de género sin la intervención de un juez”.

En 2017, los Jóvenes Demócratas abogaban de manera similar por la supresión de los indicadores de sexo en los documentos de viaje. Señalaban que “no todo el mundo se identifica como hombre o mujer. También hay personas que eligen presentarse como mujer unos días y como hombre otros. Elegir un género y un registro de género es difícil para ellos”.

En 2021, otro diputado que representaba a D66 dimitió en medio de la polémica por haber mantenido relaciones sexuales inapropiadas con varios chicos jóvenes. La publicación que desató dicha polémica la hizo un joven de 17 años que hablaba en nombre de las víctimas. Afirmó que Smeets “a menudo se ponía en contacto con chicos menores de edad” en Twitter, y dijo que había conocido a “docenas de niños” en esa situación. El adolescente lamentó además el hecho de que Smeets, a quien llamó “pedófilo”, representara los “derechos LGBTI” con carácter oficial.

A principios de este año, la Constitución neerlandesa fue modificada para incluir la “discapacidad” y la “orientación sexual” en los criterios de no discriminación del Artículo 1. La enmienda fue ideada en parte por miembros de D66, lo que llevó a algunos a especular si la pedofilia se considera ahora una característica protegida por el partido político.

Los Países Bajos, que en 2006 fueron el primer país en implantar el uso de fármacos inhibidores de la pubertad en menores, tiene un historial preocupante de defensa de la pedofilia, tanto por parte del gobierno como de personalidades públicas.

En 2006, un tribunal neerlandés rechazó un intento de los defensores de la protección infantil de prohibir el partido Amor Fraternal, Libertad y Diversidad (PNVD), que de nuevo pretendía rebajar la edad de consentimiento de 16 a 12 años, y presionaba para legalizar la pornografía infantil. El partido, fundado por Marthijn Uittenbogaard, también hizo campaña para que la pornografía se mostrara públicamente en la televisión. El PNVD fue disuelto por el gobierno en 2014.

Un académico holandés muy citado y ex profesor de la Universidad de Ámsterdam que ha escrito extensamente en apoyo de la pedofilia defendió estos grupos políticos. Gert Hekma co-creó una petición dirigida a la Corte Suprema de los Países Bajos exigiendo que el gobierno se abstuviera de prohibir la organización de Uittenbogaard.

En una antología académica de 2021 titulada Historias de Sexología: entre la Ciencia y la Política, Hekma destacó que durante la década de 1970, el Movimiento Holandés para la Reforma Sexual hizo campaña a favor de “grupos minoritarios … siendo los principales en el NVSH los transexuales y los travestis, los sadomasoquistas, los exhibicionistas y los pedófilos”.

Los intentos de rebajar la edad de consentimiento a los 12 años no tuvieron éxito, dijo Hekma, “debido a una creciente preocupación feminista”.

Otro influyente activista pro-pedofilia, Nelson Maatman, intentó revivir el PNVD, y en febrero de 2020, Maatman dio una charla en la Universidad de Ámsterdam argumentando en defensa de la pedofilia. La Universidad de Ámsterdam más tarde publicó una disculpa por haber invitado a Maatman como ponente. El año pasado, Maatman fue detenido en la Ciudad de México y se descubrió que estaba en posesión de 4 terabytes (4000 GB) de material de abuso sexual infantil.

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Aviso de contenido: Este artículo contiene fotos de contusiones y lesiones físicas. Se agradece la discreción del lector.

Una mujer de Melbourne, Australia, fue hospitalizada y quedó con heridas horribles tras el brutal ataque de un activista trans en lo que ella especula fue en represalia por sus opiniones críticas de género.

El 24 de septiembre de 2022, Ruby* y su pareja asistían al Punks Pub Crawl, una ruta anual de bares para aquellos en la escena punk rock que se celebra en Melbourne desde 1982. Ruby, bajista de una banda local, llevaba asistiendo al evento desde que era adolescente. Aunque estaba entusiasmada de volver a la tradición después de la flexibilización de las restricciones de COVID-19, la noche se convirtió en una pesadilla para ella.

“Acababa de llegar con mi pareja alrededor de las 3 de la tarde. Había unas 70 personas en la ruta de bares. Nos paramos en Carlton Gardens para hacernos una foto del grupo”, relata Ruby, que explica que inmediatamente después de hacerse la foto, tendría un incidente que desde entonces la dejó con una lesión debilitante.

“Ya me iba, estaba hablando con una amiga y me di cuenta de que un hombre caminaba al lado del grupo, pero en la dirección contraria al resto de nosotros”, dice Ruby. “Cuando pasó a mi lado, me golpeó fuertemente con el hombro y me detuve para dirigirme a él”.

Ruby describe a su agresor como “varón, pero no obviamente ‘trans'”. Como ella estaba con un grupo de individuos pertenecientes a la comunidad punk rock, no creyó inmediatamente que intentara presentarse como del sexo opuesto, y simplemente pensó que llevaba un atuendo punk clásico.

“Parecía una metalero con los labios pintados, y nunca lo había visto en mi vida”, dice. Según el informe policial que Ruby facilitó a Reduxx, se describe al individuo como de aproximadamente 1’70 metros, con pelo largo y oscuro. Llevaba camisa y pantalones negros.

Sobresaltada por el choque corporal, Ruby se enfrentó al hombre.

“Dije algo así como: ‘¿Hay algún problema? ¿Tenemos que hablar tú y yo?’. Comenzó a negar y a hacer luz de gas. Afirmó que fue un accidente y uno de sus amigos lo respaldó. Estaba claro que no había sido un accidente, así que le contesté: ‘No, él me golpeó con el hombro tan fuerte como pudo'”.

Ruby dice que los espectadores parecieron estar en desacuerdo inmediatamente con el pronombre que había usado para referirse al hombre.

“Escuché algunos murmullos de ‘¿Él?’ Como si la gente se sintiera ofendida por mi elección del pronombre”, dice. “Me quedé frente a él durante unos segundos esperando a ver si iba a empezar, pero parecía no tener nada que decir, así que me di la vuelta y me alejé”.

Pero justo en ese momento, Ruby dice que de repente la atacaron por detrás, y el hombre la empujó contra el cemento con una fuerza tremenda.

“Llevaba una chaqueta de cuero con muchas tachuelas, así que caí con fuerza y rapidez. Estiré el brazo izquierdo para amortiguar la caída con algo que no fuera la cabeza y el impacto reverberó por todo mi brazo, destrozándome el hombro y rompiéndome el brazo por la articulación”.

Ruby dice que otros asistentes a la ruta de bares le dijeron al hombre que se apartara, y ella dice que aunque le dolía mucho, no reconoció de inmediato el alcance de los daños. Una amiga suya con conocimiento de primeros auxilios le colocó un cabestrillo improvisado, y Ruby no tardó en darse cuenta de que necesitaba tratamiento médico.

Primero intentó ir a un hospital público, pero la dejaron en la sala de espera de urgencias durante horas agonizantes sin la atención adecuada, así que se marchó y más tarde fue al Hospital de Austin, famoso por su atención traumatológica. Le hicieron un TAC y una radiografía y le diagnosticaron una fractura de hombro.

Ruby proporcionó a Reduxx los informes médicos de Austin Health en los que constaba que había ingresado en la unidad de urgencias de corta estancia y que, en un principio, un traumatólogo le había dicho que tenía que someterse a una intervención quirúrgica.

Un segundo cirujano ortopédico al que Ruby acudió durante su estancia en el hospital decidió no operarla, al considerar que los resultados serían mejores si simplemente se la vigilaba de cerca y se la enviaba a fisioterapia una vez curada la lesión inicial. El cirujano dejó abierta la posibilidad de operarla si algo pasara con la lesión en el futuro.

En medio del caos de intentar obtener tratamiento médico, Ruby había logrado localizar al individuo que la había agredido a través de un contacto de su banda. Se dio cuenta de que el agresor había sido amigo de una persona con la que su grupo había actuado en el pasado y buscó más información en sus redes sociales. Consiguió identificar al agresor y, armada con la información, acudió a la policía de Melbourne y presentó una denuncia tras recibir el alta hospitalaria.

Ruby facilitó a Reduxx la declaración que firmó ante un agente de policía sobre su terrible experiencia. En la declaración, nombra a Sarah Cadzow, un hombre que se identifica como “mujer”, como su agresor.

Ella especula que su contacto mutuo en la banda había alertado a Cadzow de sus opiniones sobre la ideología de género en el Punks Pub Crawl, y que él la había golpeado como represalia.

“Quedó claro que alguien le había enseñado al agresor mis publicaciones en Facebook. Que yo sepa, el agresor nunca había estado en mi lista de amigos de Facebook, pero su amigo sí. Desde que descubrí que había hombres en las cárceles de mujeres, mi Facebook se ha centrado en los derechos y los espacios de las mujeres”, explica Ruby. “Le mandamos un mensaje al amigo poco después y él se mostró de acuerdo por escrito de lo sucedido, pero intentó justificarlo porque aparentemente [Cadzow] estaba ‘defendiendo a su comunidad’ al atacar por la espalda a una mujer de mediana edad”.

En su juventud, Cadzow había estado asociado con la organización benéfica juvenil LGBTQ Minus18.

Cadzow figuraba como miembro del equipo de desarrollo del proyecto Trans 101, un “curso intensivo sobre diversidad de género” dirigido a jóvenes y apoyado por Minus18, YGender y el Sydney Myer Fund. También escribió una biografía para el Rainbow Story Project, en la que elogiaba a Minus18 y se jactaba de haber “transicionado” cuando tenía unos 14 años.

A pesar de haber proporcionado a la policía de Melbourne dos declaraciones de testigos, así como la identidad de su agresor, Ruby explica que pasaron meses hasta que Cadzow fue finalmente acusado, en un proceso que al principio la dejó sintiéndose abandonada.

“No puedo hablar de los recursos o procedimientos policiales, pero me preocupó mucho que tardaran tanto en acusarlo. Parecía que trababa al agresor con mucha delicadeza”, dice. “Quería que hubiera un elemento disuasorio inmediato para que no volviera a hacer esto, a mí o a cualquier otra persona, y la policía no pareció tomarse en serio en absoluto esa preocupación”.

Ruby dice que observó un claro “cambio de tono” cuando la policía se enteró de que su agresor era transgénero.

“La tardanza en presentar cargos y la forma en que lo hicieron me parecieron sin duda una reticencia a actuar. Se trataba de un acto de violencia muy grave y en lo único en lo que podía pensar durante ese tiempo de espera era ‘¿Dónde están las consecuencias? ¿Qué le impide hacerlo de nuevo? ¿Qué pasa si ve a una mujer con una camiseta de Hembra Humana Adulta?”

El 25 de enero, casi exactamente cuatro meses después del incidente, Cadzow finalmente recibió cargos relacionados con la agresión a Ruby. Está previsto que comparezca ante el Tribunal de Magistrados de Melbourne el 14 de abril.

Aunque Ruby expresa cierto alivio por el hecho de que Cadzow haya sido acusado y de que la parte legal de su terrible experiencia esté avanzando después de meses estancada, le ha quedado el impacto persistente de su ataque.

“Toco el bajo, y al principio no estábamos seguros de si iba a poder seguir dando conciertos. Afortunadamente, parece que podré hacerlo, pero no muy a menudo y me duele mucho al afinar”, dice, explicando que ya no puede levantar el brazo afectado por encima del hombro.

“Nunca volveré a nadar, ni a tirar a canasta con mi hijo, coger cosas de estantes altos o tender la colada. El médico me dijo: ‘tu capacidad para levantar ese brazo por encima de la cabeza terminó cuando caíste al suelo'”.

En relación con la próxima vista de Cadzow, Ruby dice que espera que las consecuencias para él sean lo suficientemente graves como para actuar como elemento disuasorio.

“Espero que otros que puedan tener ideas similares se den cuenta de que sencillamente no se puede ir por ahí atacando impunemente a las mujeres”.

Pero incluso así, Ruby explica que le preocupa cómo tratará el caso la justicia penal de Australia, que se ha hecho famosa por su postura ante la autoidentificación de género.

“Este fue un claro acto de violencia machista, pero tengo mis dudas sobre si las estadísticas o los registros lo reflejarán al final”, dice.

“Hoy en día da mucho miedo ser una mujer que habla de los derechos de las mujeres. Este tipo de violencia está yendo demasiado lejos y tiene que parar antes de que ocurra algo aún peor.”

* – Se le ha dado un nombre diferente para proteger su privacidad.

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Las activistas por los derechos de las mujeres han expresado su preocupación por un hombre de 59 años que se dice trans que ocupa un cargo directivo en la Organización Nacional de Mujeres (NOW), con sede en Estados Unidos. James Gallmeier, también conocido como Jenny-Jaymes Gunn, describió en una ocasión la violación como una “introducción a la feminidad”.

La Organización Nacional de Mujeres (NOW) se define a sí misma como una “organización interseccional, multitemática y multiestratégica que adopta un enfoque holístico para los derechos de las mujeres”. Parte de su supuesto objetivo es luchar contra la “discriminación basada en la orientación sexual o la identidad de género en todos los ámbitos, como el empleo, la vivienda, los servicios sanitarios y la custodia de los hijos”, y uno de sus seis “temas” principales son los “Derechos LGBTQ +”.

Gallmeier, quien se identifica como “demigirl” (parte niña/chica) transgénero pansexual, ha sido miembro de la junta de la sección de Carolina del Norte de NOW desde 2019, un grupo que actualmente presiona contra un proyecto de ley diseñado para mantener a los padres informados sobre lo que las escuelas enseñan a sus hijos. Gallmeier, Coordinador de Alcance LGBTQ + de NOW, también es conocido por el nombre de Jenny-Jaymes Gunn.

Recientemente se ha sabido que Gallmeier suele publicar posts sobre sus fetiches BDSM y de “sisificación” (fetiche masculino de feminización forzada) en varias plataformas de redes sociales, al tiempo que ejerce presión contra un importante proyecto de ley de protección infantil en el estado de Carolina del Norte.

El proyecto de ley estatal 49, también llamado “Declaración de Derechos de los Padres“, fue aprobado por el Senado a principios de febrero a pesar de la oposición de los activistas trans, y se espera que sea aprobado por los miembros de la Cámara de Representantes. La ley obliga a las escuelas a informar a los padres si sus hijos quieren “cambiar de género”, y les da a los padres un acceso más directo al plan de estudios escolar.

Sin embargo, Gallmeier y otros “activistas” han alentado al gobernador Roy Cooper a vetar el proyecto de ley de protección parental, informa The Distance.

Como resultado de su reciente activismo contra los derechos de los padres con respecto a la educación de sus hijos, Gallmeier y su larga historia de fetichismo han sido objeto de escrutinio por parte de los defensores de los derechos de las mujeres y los partidarios de la protección de la infancia .

Sloan Rachmuth, activista de la educación y periodista de investigación en ese estado, ha llamado la atención sobre el cargo público de Gallmeier en NOW, y recientemente recurrió a las redes sociales para atraer la atención local hacia la actividad en línea de Gallmeier.

“Hey, colegas de NC (Carolina del Norte), ¿qué os parecería que el mismísimo ‘Jenny-Jaymes Gunn’ de Charlotte, también conocido como James Gallmeier, de la Organización Nacional de Mujeres, les dé clases de EDUCACIÓN SEXUAL a los estudiantes, desde preescolar hasta 12º grado (17/18 años)? tuiteó Rachmuth el 11 de febrero.

Acompañó su pregunta con capturas de pantalla de algunas de las cuentas de redes sociales de Gallmeier, incluido un pantallazo de su TikTok donde posaba en lencería fetichista, y tweets en los que alardeaba sobre sexo anal y violaciones en grupo.

El Instagram de Gallmeier presenta contenido igualmente perturbador.

Parece haber compilado cintas con lo más destacado de diversas fotos y videos pornográficos, incluido un cinta llamada “Latex Art” con fotos suyas y de modelos fetichistas en trajes de látex.

En una foto que Gallmeier volvió a publicar en su Instagram, se ve a una mujer embarazada posando con ropa fetichista.

Gallmeier también publica con frecuencia imágenes suyas en atuendo fetichista en Facebook, y ha compartido múltiples imágenes de sí mismo usando látex en público.

Además de sus inquietantes cuentas en las redes sociales, Gallmeier tiene es su pasado un comportamiento ostensiblemente abusivo hacia al menos una de sus ex esposas, que pidió una orden de alejamiento contra él en 2004 mientras la pareja vivía en Texas. Cuando se dictó la orden, Gallmeier ya se había casado con otra mujer.

La segunda esposa de Gallmeier caería gravemente enferma en 2012, y sería ingresada en el hospital varias veces mientras ambos lidiaban con dificultades financieras. Pero en 2015, Gallmeier participaba activamente en comunidades fetichistas en línea, presentándose como travesti y “mariquita” (sissy).

La pareja se divorciaría formalmente en 2016, y Gallmeier culpó públicamente a su exmujer de su separación, afirmando que no le dio espacio “para su transición” a mujer. Al parecer, había estado engañando a su mujer con hombres justo antes de la separación.

Durante una entrevista en YouTube, Gallmeier afirmó que en 2015, un año antes de que su esposa solicitara el divorcio, fue “víctima de un crimen de odio por ser trans”.

Le dijo a un entrevistador: “Acababa de empezar a salir del armario, socialmente, ante unas pocas personas selectas a pesar de que la parte física todavía quedaba bastante lejos y era bastante inconcebible”.

Describe haber sido agredido por varios hombres después de contarles que él y su segunda esposa habían roto para que él pudiera “transicionar”. Un hombre lo invitó a una fiesta después de que Gallmeier le enseñara unas fotos en su teléfono de él “como mujer”.

En esa fiesta fue donde Gallmeier describe haber sido agredido física y sexualmente por varios hombres. Cuenta esto de su experiencia de daño físico y sexual: “Fue mi introducción a la feminidad. Fue mi introducción a lo peligroso que es el mundo”.

Fue en esa misma época cuando Gallmeier empezó a participar activamente en FetLife, un destacado foro y comunidad fetichista en línea. Se unió a un grupo llamado “Enriching the Bonds of Enlightenment”, un grupo de “sisificación” para hombres que se excitan al participar en actos de sumisión y humillación sexual.

La pornografía de sisificación incorpora con frecuencia el concepto de un hombre obligado a usar ropa asociada a mujeres o niñas. En algunos casos, el abuso sexual forzado se presenta como un rito de paso a la “feminidad”.

En FetLife, Gallmeier usa el nombre “Jessye-Jaymes”, y las capturas de pantalla de su actividad en la plataforma muestran que interactuaba frecuentemente con fotos pornográficas de genitales de hombres en ropa interior femenina o dispositivos de castidad, un hombre transidentificado lamiendo un retrete y varias fotos de mujeres con ropa fetichista.

Gallmeier publicaba regularmente en el grupo “Enriching the Bonds of Enlightenment” información sobre su actividad sexual, incluido el cumplimiento de las directivas sexuales que le daba el hombre travesti líder del grupo, conocido como Madame Mary Josephine. Gallmeier le contaba públicamente a Josephine con cuántos hombres tenía encuentros sexuales.

En septiembre de 2018, poco después de abrir una cuenta de Facebook con su nueva identidad “femenina”, Gallmeier se mudó de Texas a Charlotte, Carolina del Norte. Comenzó a aparecer por primera vez en los recursos de NOW al año siguiente.

Desde entonces, Gallmeier ha participado activamente en muchas organizaciones de justicia social en el área de Charlotte, Carolina del Norte, incluido haber servido como Coordinador del Orgullo Trans de Charlotte de Charlotte Pride. También es copresentador de un programa llamado Coffee and Pan Dulce, donde él y el ex congresista Christian Cano hablan sobre su políticas progresistas.

En la primavera de 2020, Charlotte Pride presentó a “Jenny-Jaymes Gunn” en su “Día Digital de la Visibilidad Trans”, donde respondió a la pregunta “¿Qué significa para ti la visibilidad trans?”

Gallmeier respondió que para él, la “visibilidad trans” significa “estar ahí fuera constantemente y muy orgulloso de mi lado fashion más vanguardista”, antes de jactarse de que ser “abiertamente queer y parte de la comunidad BDSM mientras se es un activista político rompe las barreras del miedo y la ignorancia”.

En 2021, Gallmeier también fue invitado por Wedgewood Community Church “a dar un sermón de media hora sobre las redundancias del género” en el Día de la Madre.

“Uno de mis argumentos es que muchas de nuestras etiquetas o términos de cariño, como ‘madre’, construyen muros en lugar de puentes”, dijo Gallmeier durante su sermón. Continuó comparando la palabra “madre” con formas de racismo, y agregó que la palabra “no sirve para nada en el siglo XXI”.

Gallmeier también ha sido galardonado con varios premios y subvenciones desde su traslado a Charlotte. En 2022, fue galardonado con el “Premio al Progreso” por los demócratas LGBTQ del condado de Mecklenburg.

También fue nombrado miembro del Comité de Relaciones Comunitarias por Vi Lyles, la alcaldesa de Charlotte. Por ser “trans”, la Cámara de Comercio LGBTQ + de Carolina le concedió una tutoría, así como una beca y una subvención comercial por un importe no revelado.

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Un hombre que se identifica como “mujer” ha sido condenado por la violación en 2016 de un adolescente en la ciudad india de Thiruvananthapuram.

Sachu Samson, de 34 años, ha sido declarado culpable de violar a un joven de 16 años casi siete años después de que ocurriera el incidente el 23 de febrero de 2016. El Tribunal Especial de Vía Rápida de Kerala impuso a Samson una condena de siete años de prisión y una multa de 25.000 rupias (unos 300 dólares/285 euros) por el delito. La multa deberá pagarse como indemnización directamente a la víctima, y Samson se arriesga a un año más de cárcel si incumple la sentencia.

Durante una vista celebrada el 7 de febrero, la fiscalía dijo al tribunal que la violación había tenido lugar en el baño público de una estación de tren. La víctima testificó que Sansón lo había amenazado y lo había obligado a entrar en el área cerrada. El chico fue sometido a lo que se describió como “acoso sexual antinatural”. Samson obtuvo el número de teléfono del joven en algún momento durante la terrible experiencia y se puso en contacto con él en repetidas ocasiones tras la violación, exigiéndole que se volvieran a ver.

Bajo amenaza de “tortura”, la víctima no informó a su familia de la horrible experiencia. No fue hasta que la madre del adolescente comenzó a notar que su hijo actuaba de manera extraña que se descubrió el acoso de Sansón hacia el joven. La fiscalía señaló que la madre había “notado que su hijo enviaba mensajes constantemente por teléfono, y que a menudo tenía miedo”.

Incluso después de que el adolescente intentara bloquear a su agresor, Samson siguió encontrando la forma de ponerse en contacto con él a través de las redes sociales. Finalmente, la madre del joven descubrió los mensajes de Facebook que Samson le había enviado a su hijo y llamó a la policía local para presentar una denuncia. La policía colaboró con ella para “tenderle una trampa”, lo que llevó a la madre a enviar un mensaje a Samson y acordar otro encuentro, que acabó en su arresto.

Al parecer, la defensa legal de Samson había intentado usar su identidad “transgénero” para argumentar su inocencia, alegando que ahora se le conocía como “Shefina” y que se había sometido a “procedimientos médicos de afirmación de género”. Se utilizó un certificado médico como prueba de la “Intervención médica de afirmación de género” de Samson.

Durante el contrainterrogatorio, la víctima declaró que, si bien la apariencia y el nombre de Sansón habían cambiado, seguía siendo él quien lo agredió y era “una persona de sexo masculino en ese momento”.

Un médico que compareció como testigo confirmó que no había pruebas que sugirieran que la “identidad de género” de Sansón lo hubiera vuelto incapaz de cometer el delito sexual contra el menor. El tribunal tomó en cuenta las declaraciones de la víctima y del médico al rechazar el argumento de la defensa de que Samson “había sido una mujer trans todo el tiempo” y no podía haber cometido la violación.

Samson permanecerá recluido en una cárcel de mujeres hasta que sea trasladado a una “cárcel especial para convictos transgénero”, según el medio de noticias jurídicas indio, Bar and Bench.

El tribunal de Kerala ordenó al Director de la Policía General que tomara medidas especiales para Samson, al que ahora llaman “Shefina”, para salvaguardar “la dignidad y el honor de la acusada … mientras ella [sic] esté detenida en la cárcel de mujeres”.

La región de Kerala, donde se cometió el asalto, es conocida por ser uno de los lugares más “transgender-friendly” de la India. 

Los medios de comunicación indios que cubren el caso han utilizado en su mayoría pronombres femeninos para referirse al violador, calificándolo de “mujer” o “mujer trans”.

Vaishnavi Sundar, cineasta independiente, escritora y activista por los derechos de las mujeres, respondió a la cobertura incorrecta del caso y criticó de manera directa a Bar and Bench, escribiendo que estaban “capitulando” ante la ideología de género “al dirigirse constantemente a un hombre con pronombres femeninos”.

Con respecto a la condena de Sachu Samson, Sundar señaló que la orden del juez para que la policía salvaguardara la “dignidad y el honor” de Samson mientras está detenido en una prisión de mujeres significaba despreciar la dignidad y el honor de las reclusas. Sundar explicó que las prisioneras “tienen 20 veces más probabilidades de morir por suicidio y sufrir tendencias suicidas que las mujeres de la misma edad de la población general”.

Además de su trabajo independiente, Sundar también es el contacto indio para Women’s Declaration International, una organización global de voluntarias dedicadas a defender los derechos basados en el sexo de las mujeres y las niñas.

En abril de 2022, Sundar cubrió la aprobación del Tribunal Superior de Delhi de una orden para implementar términos de “autoidentificación” para cambiar los marcadores de sexo en los pasaportes. La sentencia decreta oficialmente que no sería necesaria ninguna intervención médica para que un individuo se identificara como del sexo opuesto o cambiara sus documentos legales. El Tribunal lo calificó de “innecesario y violatorio de la elección del individuo respecto a someterse a un procedimiento quirúrgico para reflejar la transición”.

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Los padres de la comunidad costera de Nanaimo, Columbia Británica, están dando la voz de alarma sobre un hombre que dice identificarse como “mujer” y que se comporta de una manera que consideran depredadora cuando utiliza las instalaciones de mujeres en el Centro Acuático local.

Janayh Wright, fotógrafa y madre de tres hijos, habló con Reduxx sobre su propio encuentro con el hombre, del que dice ya haber oído hablar antes de encontrárselo. Wright explica que estaba al tanto de los rumores de que un hombre había estado usando las instalaciones para mujeres en el Centro Acuático de Nanaimo por otros padres, algunos de los cuales dijeron que habían presentado quejas tanto al personal como a la policía local.

El 3 de febrero, Wright estaba en la piscina con su hija y su sobrina. Dijo a Reduxx que normalmente esperaba a su hija fuera de los vestuarios, pero ese día decidió acompañarla dentro.

Mientras estaba en el vestuario, Wright fue testigo de cómo un hombre con peluca y mascarilla entraba en las instalaciones de mujeres y se dirigía a la zona de duchas. Wright dice que no llevaba toalla ni bolsa de piscina, y no parecía que se fuera a cambiar o a nadar. Luego regresó y entró a la cabina contigua a la de la hija de Wright, que se estaba cambiando.

Wright observó cómo el hombre trataba de asomarse por debajo de la mampara para ver dentro de la cabina donde estaba su hija. Inmediatamente se enfrentó a él cuando salía, pero el hombre se limitó a responder que se identificaba como mujer y que era su “derecho humano estar en el vestuario de mujeres”.

Wright le dijo que le daba igual cómo se identificara, y que no debería espiar a las niñas por debajo de las cabinas.

Acompañó al hombre fuera del vestuario y denunció el incidente al personal del Centro Acuático de Nanaimo, que le dijo que no podían echarlo. Le advirtieron que podrían detenerla a ella y denunciarla por sus acciones. Incrédula, Wright llamó a la policía y denunció lo ocurrido. Actualmente se está investigando la situación.

Pero Wright no es la única madre de la localidad que ha tenido encontronazos con ese hombre en los vestuarios del Centro Acuático.

La noticia del intruso comenzó a circular en Facebook a finales de enero, cuando los usuarios comenzaron a compartir públicamente un post que había sido publicado en un grupo privado para madres de Nanaimo.

“Ayer en el Centro Acuático Nanaimo había un hombre en el vestuario femenino observando cómo se desnudaban las mujeres y los niños”, comenzaba el post, publicado el 26 de enero.

“Llevaba una peluca corta marrón que ocultaba su rostro y tenis de color verde neón/negro … Se quitaba y ponía los tenis y caminaba hacia las duchas/baños y volvía, una y otra vez, para que pareciera que estaba haciendo algo. Se sentó en un vestuario privado, completamente vestido, durante unos 10 minutos con la puerta abierta, justo enfrente de donde se estaba cambiando una niña pequeña”.

Según la publicación, varias personas alertaron al Centro Acuático de Nanaimo sobre el hombre, pero se negaron a intervenir a menos que estuviera “causando una escena o haciéndole daño a alguien”.

En declaraciones a Reduxx, Wright dijo que no era transfóbica, pero que se ha dado cuenta de que “ahora, cualquier depredador puede apropiarse de una identidad transgénero y acceder a nuestros hijos. Me ha abierto los ojos al hecho de que no tenemos derechos como mujeres, y los niños no tienen derechos”.

“Si no hubiera estado allí y hubiera actuado con la debida cautela”, agregó, “¿quién sabe qué podría haber pasado?”

La noche del incidente, Wright publicó un post en Facebook sobre el encuentro que fue ampliamente compartido y recibió un apoyo abrumador de padres y otros miembros de la comunidad, muchos agradeciéndole sus acciones.

Una usuaria compartió la historia de su propio encuentro con el hombre: “Fuimos unos días antes de esto y él estaba allí. Mirando a las niñas que se cambiaban e incluso fue y se sentó en una cabina con la puerta abierto y miraba a las personas en la cabina de enfrente. Deambulaba por todas partes mirando a todo el mundo”.

Wright le dijo a Reduxx que, aunque había recibido algunos mensajes acusándola de transfobia, la respuesta había sido 90% positiva. “La gente está empezando a despertar”, dijo. “Yo era ajena al hecho de que uno se podía autoidentificar”.

Wright se refería al proyecto de ley C-16, que modificó la Ley de Derechos Humanos y el Código Penal canadienses para incluir la “identidad de género” y la “expresión de género”, otorgando a los hombres acceso a espacios femeninos segregados por sexo como baños, vestuarios, prisiones y refugios para víctimas de violación. Las leyes provinciales de derechos humanos de Canadá tienen un lenguaje similar.

“El proyecto de ley C-16 tiene lagunas”, dijo Wright. “No hay seguridad para las mujeres y los niños”.

Al día siguiente del incidente, Wright publicó otro post agradeciendo a todos su apoyo e invitándolos a manifestarse con ella ante el Centro Acuático Nanaimo en señal de protesta. Algunos medios de comunicación cubrieron la manifestación, pero la tacharon de “anti-trans“.

Alrededor de 100 personas acudieron a apoyar a Wright y expresar su preocupación no solo por el incidente, sino también por la seguridad de los niños y los derechos de las mujeres.

Uno de los asistentes, Scott Geiler, pronunció un discurso apasionado ante los congregados:

“Los espacios segregados por sexo son importantes para la seguridad de nuestros hijos. Son importantes para los derechos y la seguridad de las mujeres; Son importantes para los homosexuales… Tienes que empezar a luchar por tus derechos basados en el sexo… Si no utilizas un lenguaje basado en el sexo, tus derechos no estarán protegidos. Que no te confundan. Te discriminan por razón de sexo”.

Geiler le dijo a Reduxx que la manifestación había sido bien recibida por la comunidad.

“Vinieron muchas mujeres, algunos padres y niños con pancartas. Cero activistas trans y silencio absoluto en el Orgullo de Nanaimo”.

El Orgullo de Nanaimo rompió su silencio más tarde ese mismo día con una publicación en Facebook en la que condenan los “argumentos anti-trans” de la respuesta del público al hombre depredador.

La publicación continuaba: “Simplemente no podemos saber en este momento si este presunto delincuente es trans en las primeras etapas de la transición, o un hombre cisgénero que busca lagunas, o alguien malicioso que usa un miedo común como foco de atracción para crear una turba anti trans”.

Wright dice que hace caso omiso de las acusaciones y se centra en lo que realmente importa: la seguridad de las mujeres y los niños. Está a punto de fundar una organización sin ánimo de lucro y utiliza el hashtag #makemesafe para difundir el mensaje en las redes sociales, como Twitter, Instagram y Facebook.

“Solo quiero hacer correr la voz de que las mujeres y los niños no estamos seguros”, dijo Wright en declaraciones a Reduxx. “Mi objetivo es concienciar y hacer que la gente se levante conmigo para pedirle al gobierno que analice esto y que cree un cambio para la seguridad de las mujeres y los niños”.

Wright espera que en un futuro la organización sin ánimo de lucro pueda convertirse en una organización que ayude a las personas que han sufrido abuso y trauma sexual a acceder a asesoramiento.

Por ahora, su objetivo es concienciar y elaborar un plan que “cree seguridad e igualdad para todos”.

“Mi abuela estaba muy metida en la lucha por los derechos de las mujeres en su día y siempre abogó por eso”, dijo Wright. “Ahora tiene demencia, pero estaría a mi lado si estuviera en su sano juicio. Voy a hacer que se sienta orgullosa. Sé que puedo con esto”.

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