La estudiante que vimos en un video siendo atacada por un hombre transidentificado en una universidad brasileña, ha hablado con Reduxx y ha proporcionado nuevos detalles inquietantes sobre el incidente.
El 14 de diciembre, imágenes de la Universidad de Brasilia (UNB) comenzaron a circular en las redes sociales y se hicieron virales rápidamente. Los videoclips, tomados con la cámara de teléfono, mostraban a un hombre grande y barbudo que llevaba un vestido puesto gritando muy alto en la cara de una estudiante, que parecía estar tratando de alejarse de él.
La mujer que fue atacada ha grabado otro video en donde se la puede escuchar señalando las características obvias del hombre.
“¡Pero eres un tío!” Dice la estudiante.
“¡No soy un tío! Nada me impide llevar mi mano a tu cara. ¡Chica, respétame! ¡Respétame!” Se le escucha gritar, usando una expresión coloquial que significa “abofetear”.
En algunos clips más largos, también se puede escuchar al estudiante varón transidentificado decir que era un “crimen” llamarlo hombre.
Reduxx confirmó la identidad del hombre transidentificado como un estudiante que se hace llamar Brigitte Lúcia. Lúcia, que parece identificarse como hombre homosexual además de como mujer transgénero, se había presentado para un puesto en el consejo estudiantil de la universidad.
Laura, un seudónimo, ya que está preocupada por su seguridad y desea permanecer en el anonimato, ha accedido a hablar con Reduxx sobre el incidente y proporcionar detalles adicionales sobre lo que sucedió ese día.
Laura ha sido estudiante de la UNB durante 3 años, pero dice que esta fue la primera vez que interactuó con Lúcia. Laura explica que no estaba al tanto de la política universitaria que permitía a los hombres que simplemente se identificaban como “mujeres” entrar en los baños de mujeres, incluso en los que no eran para todos los géneros.
“El baño donde sucedió todo es un baño de mujeres, para mujeres. Pero me informaron que la UNB tiene pautas que separan los baños por identidad de género, no por sexo. Es decir, cualquier persona que se identifique como mujer puede entrar en el baño de mujeres. Yo no sabía eso”.
Al entrar al baño y ver a Lúcia, Laura dice que se puso nerviosa. Explicó que había habido varios incidentes recientes de acoso sexual y violación en el campus, y que también ha habido hombres que iban a los baños de mujeres para filmar a las mujeres usando el baño.
“Esto me causó mucho pánico”, dice Laura, “así que le pregunté qué estaba haciendo allí, porque me di cuenta de que era hombre. Tiene barba, es alto, tiene una voz masculina. No parecía una mujer transgénero”.
Laura dice que ni siquiera se oponía a la idea de que los hombres transidentificados que han “transicionado completamente” usaran las instalaciones para mujeres, pero no podía entenderlo cuando Lúcia comenzó a insistir en que era una mujer.
“Tan pronto como me acerqué a él, me dijo que era una mujer… Pero no lo entendía, porque yo no veía más que a un hombre. Se me vino encima y me iba a atacar allí mismo en el baño, pero llegó otra chica y me defendió”.
La otra estudiante separó a Laura de Lúcia, rodeándola con un brazo y guiándola fuera del baño. Pero tan pronto como las dos entraron en la cafetería, Lúcia se acercó a ellas y empezó a gritarles frenéticamente.
“Empezó a llamarme transfóbica y a ponerme el dedo en la cara… Comenzó a gritarme, empujarme e insultarme. Me arrinconaba todo el tiempo y me intimidaba, como si quisiera que me defendiera … Tenía miedo de que me pegara allí mismo. En realidad tenía miedo de morir o algo”, dice Laura.
Laura dice que Lúcia la persiguió hasta la oficina de dirección de la universidad, y la empujó contra una pared de vidrio. Ella dice que se golpeó la cabeza y un brazo contra la pared y que se empezó a sentir mareada. Un empleado de la universidad finalmente la apartó de Lucía.
Laura ha presentado una queja ante la seguridad del campus y una denuncia ante el departamento de policía local por lesiones corporales. No ha vuelto a la cafetería por temor a encontrarse con Lúcia de nuevo, y le preocupa que intente arruinar su carrera académica.
Cuando se le preguntó si tenía un mensaje que transmitir a la audiencia internacional de mujeres que vieron el video de su ataque, Laura explica que ha reflexionado sobre las opiniones que tenía antes de su terrible experiencia con Lucía.
“Inicialmente, habría dicho que las mujeres deberían tener más cuidado y no ir solas a los baños o vestuarios debido a la amenaza de encontrarse con un hombre allí … En estas últimas horas, desde que salió la noticia [de lo que me sucedió], he estado reflexionando sobre cómo me acusan de transfobia simplemente por actuar según mi propia percepción de la realidad”.
Laura dice que, desde que el incidente se volvió viral, algunos estudiantes transactivistas han criticado su supuesta “transfobia” y han pedido su expulsión de la universidad.
“Simplemente le pedí a esa persona que saliera del baño de mujeres. Su respuesta fue insultarme, humillarme y agredirme. Creo que si estuviera tan seguro de su identidad, podríamos haber tenido una conversación sana sin todo el estrés. Pero si una simple pregunta que le hice, basada en mi propia percepción de la realidad, fue suficiente para provocarle a esa persona un ataque de ira, me gustaría entender por qué me acusan a mí de mala conducta y no a él”.
Y concluye: “Así que ya no voy a decirles a las mujeres que tengan cuidado … Mi mensaje es: Actuad. Si algo te hace sentir incómoda, di ‘no’. Di ‘No quiero’ o ‘No estoy bien’. Simplemente hazlo. Creo que podemos cambiar las cosas con nuestras acciones. A las mujeres se nos dice que seamos amables y pasivas, pero la acción es la mejor manera, en mi opinión, de cambiar los problemas que nos afligen”.
Reduxx es una nueva plataforma en pro de los derechos de la mujer y de los menores de edad con noticias y artículos. Somos 100% independientes! Colabora con nuestro proyecto uniéndote a nuestro Patreon.one-time donation.
