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AUSTRALIA: Una concejala se enfrentará a un tribunal de discriminación por “malgenerizar” a un hombre que se dice trans que amenazó con agredirla

Una concejala de Hobart, Australia, está siendo investigada por una publicación en redes sociales en la que describía a un varón que se dice trans como “hombre”. Louise Elliot, que ya había sido objeto de una investigación judicial por decir que “las mujeres trans son hombres”, fue víctima de amenazas por parte del mismo individuo que la denunció por “malgenerizarlo”.

El 24 de julio, Elliot anunció a través de su cuenta de X que estaba siendo sometida a otra investigación, esta vez por calificar a un hombre que se dice trans que amenazó con agredirla como “hombre”. El incidente había ocurrido el día anterior, cuando Elliot hacía campaña en un centro comercial. Al parecer, el hombre, cuyo nombre aún no ha trascendido, pasó junto a Elliot y le dijo: “Te voy a hacer pedazos”.

Elliot dijo en X que el individuo era abiertamente masculino en apariencia y comportamiento.

“Lo describí [a elle] como un hombre, ya que eso es lo que vi; una persona obviamente masculina con un cuerpo masculino fornido, mandíbula masculina, andares masculinos, voz masculina y, definitivamente, agresividad masculina”, escribió Elliot. “Esta persona me amenazó, y ahora soy yo la que está siendo investigada por ‘malgenerizar’. No tenía ninguna insignia visible con su nombre, ni “mujer trans” tatuado en la frente. Me he puesto en manos de una abogada para luchar contra esto, otra vez”.

Aunque los detalles de las acusaciones son limitados mientras se lleva a cabo la investigación, Reduxx ha visto documentación que confirma que Elliot está acusada de “posible incitación al odio, desprecio grave o ridiculización grave por motivos de identidad de género” al “malgenerizar e insultar a mujeres transgénero” y “referirse a su ‘abuso'”.

Sin embargo, en un documento de 17 páginas en el que se exponen las supuestas ofensas de Elliot, se afirma que su lenguaje puede “ir más allá… y puede tener el efecto de incitar al odio hacia las mujeres transgénero y las personas transgénero en general”.

La defensa legal de Elliot, abogada y ex candidata del Partido Liberal Katherine Deves, recibió el 13 de agosto una carta de la Comisionada contra la Discriminación, Sarah Bolt, en la que se notificaba a Elliot que la denuncia contra ella iba a pasar al Tribunal Civil y Administrativo de Tasmania. Una nota a pie de página debajo de la firma de Bolt dice: “Celebrando la diferencia, abrazando la igualdad”.

Curiosamente, el informe de derivación de la Comisionada contra la Discriminación, que detalla las declaraciones específicas hechas por Elliot, contiene un error y acusa falsamente a Elliot de elaborar un “Boletín de Calificaciones de Candidatos” que en realidad fue creado por el Lobby Cristiano Australiano. El folleto, en cuya elaboración Elliot no participó, la califica de manera positiva y afirma que “apoya los derechos de los progenitores” y que “protegerá a menores vulnerables y confusos con su sexo”.

Pero a pesar de no haber hecho los materiales ella misma, Elliot es acusada por la Comisionada contra la Discriminación de incitar al odio al “hacer una asociación negativa por el acceso a la terapia de reemplazo hormonal de afirmación de género para jóvenes transgénero, fomentando así el odio hacia aquellas personas que apoyan y facilitan que la juventud transgénero acceda a esta intervención médica que salva vidas”.

El informe también destaca varias publicaciones en redes sociales realizadas por Elliot, incluida una publicada en su cuenta de X el 29 de julio de 2023, que decía: “Los hombres rabiosos, gritones, narcisistas y volátiles. Recuerdo claramente sus caras, sus burlas y abusos, su hedor. Estar en medio del evento de Hobart lo cambió todo. Los peligros de la secta se hicieron muy reales”.

La declaración de Elliot se refiere a la reacción de los transactivistas a un acto en favor de los derechos de las mujeres al que asistió el 21 de marzo de 2023, organizado por Standing for Women y dirigido por la activista británica por los derechos de las mujeres Kellie Jay-Keen. En un vídeo del evento, que se retransmitió en vivo en su momento, una multitud de cientos de transactivistas rodeó a las mujeres e intentó ahogar sus voces con cánticos y gritos.

Bolt, la Comisionada contra la Discriminación, comentó: “En ese post, Louise Elliot malgenerizó e insultó a las mujeres transgénero presentes”.

En declaraciones a Reduxx, Elliot calificó la investigación de “despilfarro de recursos”, ya que es el dinero de los contribuyentes el que financia “esta basura”.

“Una vez más, la ley se convierte en un arma y se despilfarra un montón de dinero de los contribuyentes atacando a gente que dice la verdad. Esta absurda denuncia se debe esencialmente a que identifico correctamente a los hombres como hombres y me refiera a ellos como tales”, dijo Elliot.

“Un individio, muy claramente de sexo masculino, llamó mi atención y me amenazó en un supermercado local, diciéndome “te voy a hacer trizas” mientras hacía la señal de brazo fuerte, y luego gritó ‘derechos trans’. Y ahora me están investigando por discriminación e incitación al odio por llamarlo “él”. Esta persona me amenazó, pero ahora la ley me persigue a mí”, continuó.

Elliot ha soportado múltiples advertencias e investigaciones desde que asistió al evento Let Women Speak (Dejad Hablar a las Mujeres) el pasado marzo. Apenas un mes después de su participación, donde pronunció un discurso en el que afirmaba que es imposible cambiar de sexo, y que “las mujeres trans… siguen siendo hombres biológicos”, Elliot recibió una carta de la Comisionada contra la Discriminación, Bolt, en la que se le informaba de que se había abierto una investigación sobre sus declaraciones por “incitar al odio” en virtud de la Ley Antidiscriminación de Tasmania.

“Aunque la mayoría de los hombres son personas decentes, amables y solidarias, los hombres representan un peligro inherente para las mujeres. La gran mayoría de los delincuentes sexuales y perpetradores de actos violentos son hombres. Una de cada diez mujeres australianas ha sufrido violencia a manos de un desconocido. Una de cada cinco mujeres australianas ha sufrido violencia sexual”, dijo Elliot en el evento.

En noviembre, Bolt, la Comisionada contra la Discriminación, dictaminó que el caso de Elliot pasaría a investigación judicial. En respuesta, Elliot continuó hablando sobre su situación en X, revelando que también había sido amonestada por un panel del Código de Conducta (artículo en español) del ayuntamiento de Hobart por criticar la formación en ideología de género y decir que es una forma de “reeducación” iniciada tras la apertura de la investigación contra ella por parte de la Comisionada.

“Tuvimos una sesión de formación de una organización local, y cuestioné algunos de los detalles que estaban en su hoja informativa. Algunos de los detalles me parecieron bastante preocupantes, por ejemplo, las afirmaciones de que ‘las mujeres trans no están dominando el deporte femenino’. No estaba de acuerdo con eso y tuiteé algunas fotos de mujeres trans jugando en el fútbol femenino, y está sucediendo en todo el mundo”, dijo Elliot.

“En la hoja informativa que teníamos, también intentaban decir que porque las mujeres negras son mujeres, las mujeres trans son mujeres. Y me pareció una declaración realmente inquietante, bastante racista y alejada de la verdad”.

La hoja informativa presentada durante la sesión de formación sobre diversidad, impartida en septiembre por Working It Out Tasmania, también sostenía que los hombres que se dicen trans no representan un riesgo en espacios exclusivos para mujeres.

“Hay muy pocas pruebas de que personas con motivos criminales, por ejemplo, agresión sexual, se hayan infiltrado en secreto en los espacios exclusivos para mujeres. Casi todas las historias que han aparecido en los medios de comunicación o en las investigaciones al respecto han sido desmentidas o desacreditadas”, afirma el documento.

La investigación de la Comisionada sobre Elliot por sus declaraciones en el acto por los derechos de las mujeres se archivó en marzo, después de casi un año. El proceso fue costoso para la concejala de Hobart, que tuvo que gastar casi 20.000 dólares en honorarios legales para defenderse. Aunque ha estado recaudando fondos para hacer frente a sus gastos, las investigaciones de la Comisionada sobre ella por supuesta “incitación al odio” han sido financiadas por los contribuyentes.

Además del litigio, Elliot dice que también ha estado experimentando acoso por parte de sus colegas por criticar la ideología de identidad de género. En un video que compartió en X en octubre, Elliot describió cómo había sido señalada por sus opiniones.

“En los últimos meses, he sufrido un acoso bastante fuerte por parte de algunos de los concejales de Hobart, y colectivamente como ayuntamiento. En el Ayuntamiento de Hobart se habla mucho de inclusión, diversidad y de ser acogedores y amables… Pero la inclusión es bienvenida si estás de acuerdo con su forma de pensar. Si no estás de acuerdo, te excluyen, te persiguen y te acosan», afirmó.

Durante una reunión, la concejala y teniente de alcalde Helen Burnet presentó una moción para que el ayuntamiento escribiera a tres organizaciones diferentes para quejarse de Elliot. Los concejales escribieron a la Comisión de Integridad, a la Comisión contra la Discriminación y a los funcionarios de la administración local para solicitar que se tomaran medidas contra Elliot por una serie de publicaciones que hizo en X.

Elliot reveló además que la concejala Helen Burnet le había enviado una carta en la que la reprendía por sus opiniones.

“Usted ha hablado constantemente en contra de las personas transgénero y ha negado públicamente que las mujeres transgénero sean mujeres”, decía la carta. A petición de Burnet, el ayuntamiento pidió a la Comisionada contra la Discriminación que considerara que, en su opinión, Elliot había infringido la Ley Antidiscriminación de 1998, que fue modificada en 2019 para incluir la categoría subjetiva de identidad de género, pero que actualmente no ofrece protecciones legales sobre la base del sexo biológico.


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GERMANY: Trans-Identified Male Convicts Transferred to Women’s Prisons Ahead Of New Gender Self-Identification Law

Germany has begun transferring violent male convicts who “identify” as women into female prisons, despite the fact the nation hasn’t yet formally enacted its gender self-identification law. Among them are dangerous sex offenders and pedophiles.

On April 12, the German Parliament, or Bundestag, passed one of the world’s most far-reaching sex self-determination policies, known as the Self-Determination Act (SBGG). But while the gender identity policies are not set to come into effect until November, correctional institutions are already transferring male criminals into the female prison estate in anticipation of the law.

Women‘s rights organization Initiative Lasst Frauen Sprechen (Let Women Speak) requested figures from all ministries of justice in the federal states in Germany on how many men have been or are currently imprisoned in women’s correctional facilities since 2023. The campaign group also asked for information on the nature of the crimes the men had committed. 

The response from government officials show that males are already being housed in women’s prisons in every federal state, a practice that began months ahead of the German self-identification law coming into force in November. The only federal state that does not house men in women’s prisons is Saarland, because there are no women’s prisons in the region. As a result, trans-identified male criminals in the state may be relocated to female facilities in other federal districts.

Of the federal states with males housed in women’s prisons, Berlin stands out as the most saturated. According to official information from the Senate Department of Justice in Berlin, since 2023 “15 people whose sex was registered as male at birth have been imprisoned in the Berlin correctional facility for women.” 

Details of their crimes and convictions were not provided on the grounds that the Berlin prisons do not report the offenses to the Senate Administration. Therefore, that information is not required to be revealed through the Freedom of Information Act.

The Berlin Senate Department of Justice describes 15 men in the women’s prison as a “small number” and the disclosure of the criminal offenses as a “danger to the identifiability of these people,” suggesting their crimes were highly-publicized.

Added rationalization for withholding information regarding their convictions, according to authorities, is to avoid the “stigmatization” of these male criminals. 

However, as previously reported by Reduxx, male sex offenders are among the men being transferred to the Berlin women’s prison. Trans-identified sex offender Ömer “Laura” K., who posed as a female police officer and received a 7-year prison sentence for rape, aggravated robbery and extortion, was recently revealed to be among the transfers. While serving his sentence in a women’s prison, he will soon stand trial for the possession of child pornography.

Another presumed transfer identified by Reduxx is 63-year-old transgender pedophile “Klaus T.”, who was sentenced to 5 years in prison for the sexual abuse of his 9-year-old granddaughter and the sexual abuse of a 10-year-old girl from the neighborhood, as well as for the production of child pornography. Klaus was sentenced “as a woman,” indicating he either has or will be sent to a women’s facility. 

German outlet NiUS reports that the male prisoners in Berlin are not housed in isolation from women, but are in a ward with women and have shared access to their spaces. While “case by case” decisions can be made to transfer a male inmate back to a men’s prison on the basis of risk, it is unclear if any such cases have arisen yet.

According to information from the Berlin Senate Administration, there have been no complaints of assaults or attacks by male transfers on female inmates. However, information from the state ministry in Sachsen indicates the government has been actively suppressing such data from release.

In January of 2024, incarcerated women in Sachsen spoke to the Freie Presse and reported that a trans-identified male prisoner threatened to assault them, insulted them, and forced them and the female officers to watch him masturbate. Female officers then allegedly refused to monitor him when he was taken to the security cell. When asked by a journalist from Die Welt why these attacks were not reported, the state ministry claimed that the attacks had “no criminal relevance.”

The reports from female inmates stand in stark contrast to the denial of such cases from the Berlin Senate Administration.

On August 12, the UN Special Rapporteur on Violence Against Women and Girls, Reem Alsalem, published a letter she had sent to the German Government addressing the threat to women’s rights presented by the Gender Self-Determination Act (SBGG).

“While the Gender Self-Determination Act states that it does not regulate matters concerning detention facilities, it also currently does not provide any express safeguards to prevent sexual predators from potentially exploiting the law to gain access (for example, as inmates or staff) to female prison facilities,” Alsalem wrote in her letter, which was initially sent in June of 2024.

The UN Rapporteur continued to inform the German government that detaining male convicts with female inmates constituted an acknowledged form of torture, adding, “In the context of deprivation of liberty, there is a recognized need to protect prison spaces designated exclusively for women. Threats and a sense of collective insecurity or violation of female inmates’ privacy in the presence of individuals of the opposite sex in prison spaces have been acknowledged by the Special Rapporteur on Torture as forms of ill-treatment.”

Alsalem also released a response she had received from the Permanent Mission of Germany to the UN on August 5, which stated: “The Federal Republic of Germany refutes the allegation that in ensuring the right to self-determination, it ‘falls short of a number of human rights obligations’.”

The reply continued: “The new law on legal gender recognition will enable non-binary, intersex and transgender persons to change their birth registries and subsequently identifying documents in line with their gender identity. The law does not make any changes to existing legislation, such as the General Act on Equal Treatment and therefore has no legal implications on the access to single sex spaces.”

It also emphasized that “the Association of Women’s Shelters explicitly welcomed the new law and voiced its concern over the increasing violence against intersex and transgender persons identifying as female
and their particular marginalisation,” and added that “the Association points out that women in all their diversity should receive shelter from violence.”

The former Justice Senator for the State of Berlin and politician from the German Green Party, Dirk Behrendt, campaigned for the legal reform for people who claim a transgender status. In 2021, Berlin became the first federal state in Germany to introduce sex self-identification. Behrendt described this as a “requirement for a contemporary dealing with trans people in prison.”

The principle of separation “of male and female prisoners” was deleted from Berlin’s legal code. In its place, the statement “prisoners of different sexes are housed separately from each other” was added, as well as the assertion that “the principle of separate accommodation can be deviated in individual cases, taking into account the personality and needs of the prisoners, especially if prisoners’ gender identity differs from their legal sex or if they permanently feel neither male nor female.”

The change in law affects correctional facilities for adults, correctional facilities for juveniles, forensic correctional facilities and pre-trial detention centers in the state of Berlin.

Behrendt, who lives with his husband in Berlin-Kreuzberg, has appeared several times in public hoisting the trans pride flag onto public buildings. The pink, blue, and white flag was designed by crossdressing fetishist Robert Hogge, who wrote stories about swapping bodies with lesbians and marrying a little girl who doesn’t age, as Reduxx has described previously. 

Since leaving his post as the Justice Senator, Behrendt is now working as a judge again, and is campaigning to include a so-called “sexual identity” in the German constitution. Legal scholars have warned that this could also lead to the inclusion of pedophilia as a “sexual identity,” and that amending the constitution with such wording could “enable pedocriminals to demand their own rights.”

In August of 2022, it was reported that three men had been transferred to the women’s prison since September 2021 and that another three men had been sent directly to the women’s prison system in Berlin. Two of the “trans people” are imprisoned on convictions of child sexual abuse and sexual assault. Within two years, the number of men in Berlin women’s prison has almost tripled. 

The Federal Chairman of the Association of Prison Officers in Germany (BSBD) René Müller told Die Welt that attacks by male prisoners on women were not always reported by the victims. He warns that prisoners will figure out “pretty quickly” how to exploit the system “for more comfortable accommodation” or for “criminal purposes.”


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AUS: Hobart City Councillor to Face Discrimination Tribunal for “Misgendering” Trans-Identified Male Who Threatened to Assault Her

A city councillor in Hobart, Australia, is under investigation for a social media post describing a trans-identified male as a “man.” Louise Elliot, who was previously the subject of a tribunal inquiry for saying “trans women are men,” was previously the victim of threats from the very individual who reported her for “misgendering” him.

On July 24, Elliot announced via her X account that she was being subjected to yet another investigation, this time for labeling a trans-identified male who threatened to assault her as a “man.” The incident had occurred the day before while Elliot was campaigning at a shopping center. The man, who cannot yet be named, reportedly walked by Elliot and told her “I’m going to rip you to shreds.”

On X, Elliot says the individual was overtly male in appearance and behavior.

“I described them as a man as that’s what I saw; an obvious male person with heavy male build, male jawline, male gait, male voice, and definitely male aggression,” Elliot wrote. “This person threatened me, and now I’m the one being investigated for ‘misgendering.’ There was no visible name badge, no ‘transwoman’ tattooed on forehead. I have lawyered up to fight this, again.”

Although details of the allegations are limited while the investigation is underway, Reduxx has seen documentation confirming that Elliot is accused of “possible incitement to hatred, serious contempt, or severe ridicule on the basis of gender identity” by “misgendering and insulting transgender women” and “referring to their ‘abuse.'”

However, in a 17-page document outlining Elliot’s alleged offenses, it is claimed that her language may “go further… and may have the effect of inciting hatred towards transgender women and transgender people more generally.”

Elliot’s legal defense, lawyer and former Liberal Party candidate Katherine Deves, received a letter from the Anti-Discrimination Commissioner, Sarah Bolt, on August 13 notifying Elliot that the complaint against her is set to proceed to the Tasmanian Civil and Administrative Tribunal. A footnote beneath Bolt’s signature reads, “Celebrating difference, embracing equality.”

Curiously, the Anti-Discrimination Commissioner’s referral report, which details specific statements made by Elliot, contains an error and falsely accuses Elliot of producing a “Candidate Report Card” which was in fact created by the Australian Christian Lobby. The leaflet, which Elliot had no part in creating, rates her positively and states that she “supports parental rights” and “will protect vulnerable and sex-confused kids.”

But despite having not made the materials herself, Elliot is accused by the Anti-Discrimination Commissioner of inciting hatred by “making a negative association for access to gender affirming hormone replacement therapy for transgender youth, thus encouraging hated towards those people that support and facilitate transgender youth in accessing this life-saving medical intervention.”

The report also highlights several social media posts made by Elliot, including one post made to her X account on July 29, 2023, which read: “The rabid, screaming, narcissistic, volatile men. I can clearly remember their faces, their taunts and abuse, their stench. Being in the thick of the Hobart event changed everything. The dangers of the cult became very real.”

Elliot’s statement refers to the reaction from trans activists to a women’s rights event she attended on March 21, 2023, organized by Standing for Women and led by British women’s rights campaigner Kellie Jay-Keen. In a video of the event, which was live-streamed at the time, a large mob of hundreds of trans activists surrounded the women and attempted to drown out their voices with chants and shouts.

Anti-Discrimination Commissioner Bolt commented, “By this post Louise Elliot misgendered and insulted those transgender women present.”

Speaking to Reduxx, Elliot called the investigation a “waste of resources,” as it is taxpayers’ money which funds “this rubbish.”

“Yet again the law is being weaponized and significant taxpayer money wasted attacking people who tell the truth. This absurd complaint is essentially about me correctly identifying men as men and referring to them as such,” Elliot said.

“A very obvious male person proactively got my attention and threatened me in a local supermarket, telling me that ‘I’m going to rip you to shreds’ while doing a strong arm sign – then yelled out ‘trans rights’. And now I’m being investigated for discrimination and inciting hatred for calling him a ‘he’. This person threatened me, but now the law is after me,” she continued.

Elliot has endured multiple warnings and investigations since attending the Let Women Speak rally last March. Just one month after her participation, where she delivered a speech stating that it is impossible to change sex, and that “trans women… remain biological men,” Elliot received a letter from Anti-Discrimination Commissioner Bolt informing her that an investigation had been opened into her statements for “inciting hatred” under the Tasmanian Anti-Discrimination Act.

“While the majority of men are decent, kind, and caring people, men present an inherent danger to women. The vast majority of sex offenders and violence perpetrators are men. One in ten Australian women have experienced violence at the hands of a stranger. One in five Australian women have experienced sexual violence,” Elliot said at the rally.

In November, Anti-Discrimination Commissioner Bolt ruled that Elliot’s case would proceed to a tribunal inquiry. In response, Elliot continued to be vocal about her situation on X, revealing that she had additionally been cautioned by a Code of Conduct panel within the Hobart city council for criticizing gender ideology training as a form of “re-education” initiated after the investigation against her was opened by the ADC.

“We had a training session from a local organization, and I questioned some of the details that were in their fact sheet. Some of the details I found quite concerning, for example, statements that, ‘Trans women are not dominating women’s sport.’ I disagreed with that and tweeted some pictures of trans women playing in women’s soccer, and it’s happening globally,” Elliot said.

“In the fact sheet we had, they also tried to say that because black women are women, trans women are women. And I found that really quite a disturbing statement, quite racist and far from the truth.”

The fact sheet presented during the diversity training session, run in September by Working It Out Tasmania, also argued that trans-identified males do not pose a risk in female-only spaces.

“There is very little evidence of women’s spaces being secretly infiltrated by people with criminal motives, eg, sexual assault. Nearly every story that has emerged in the media or research regarding this has been disproven or discredited,” the document stated.

The ADC investigation into Elliot for her statements at the women’s rights rally was dropped in March, after nearly a year. The process was costly for the Hobart councilor, and Elliot said she had to spend nearly $20,000 in court and legal fees to defend herself. While she has been crowdfunding to offset her costs, the ADC investigations into her for allegedly “inciting hatred” have been funded by taxpayers.

In addition to the litigation, Elliot says she’s also been experiencing harassment from her colleagues for criticizing gender identity ideology. In a video she shared to X in October, Elliot described how she had been singled out for her views.

“Over the past several months, I’ve been copping some pretty heavy bullying by some of the Hobart City Councilors, and collectively as a council. You hear the Hobart City Council talking a lot about inclusion, diversity, and being welcoming and kind… But inclusion is welcomed if you agree with their thinking. If you don’t agree, then you are heavily excluded and targeted and bullied,” she said.

During one meeting, the Deputy Lord Mayor Councilor Helen Burnet put forward a motion that the council write to three different organizations to complain about Elliot. The councilors wrote to the Integrity Commission, the Anti-Discrimination Commission, and local government officials to request action be taken against Elliot over a series of posts she made on X.

Elliot further revealed that she had been sent a letter by Deputy Lord Mayor Councillor Helen Burnet chastising her for her views.

“You have consistently spoken out against transgender people and have on the public record refuted that transgender women are women,” the letter read. At Burnet’s request the city council asked the Anti-Discrimination Commissioner to consider that Elliot had, in their view, breached the Anti-Discrimination Act of 1998, which was amended in 2019 to include the subjective category of gender identity, but does not presently provide legal protections on the basis of biological sex.


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AUSTRALIA: Un equipo de fútbol femenino con CINCO hombres que se dicen trans gana la gran final en un partido de “alta seguridad” donde las cámaras estaban prohibidas

Un equipo australiano de fútbol femenino de la Premier League “trans inclusivo” con cinco jugadores varones se ha asegurado la victoria en la gran final después de dominar los partidos todo el verano. Durante la temporada 2024 de la North West Sydney Football Women’s Premier Competition, los Flying Bats ganaron los 17 partidos y marcaron 76 goles, mientras que sólo se anotaron 8 puntos en su contra.

Los Flying Bats, un club de fútbol para “mujeres autoidentificadas y personas no binarias”, ha atraído importantes críticas que han ido en aumento a lo largo del último año. Es de suponer que las crecientes protestas motivaron la decisión de las autoridades de reforzar las medidas de seguridad durante el partido de la gran final de la Primera División Femenina disputado el domingo, que ganaron 5-4 al West Pennant Hills Cherrybrook Football Club.

A principios de este año, el equipo recibió un premio de 1.000 dólares por ganar la Copa Beryl Ackroyd de pretemporada de la Liga de Sídney Noroeste, después de una temporada en la que ganaron todos los partidos que jugaron en la Primera División Femenina, 10-0. La noticia generó un gran revuelo y llevó a los Flying Bats a los titulares internacionales.

El locutor de radio australiano Ben Fordham habló con uno de los asistentes al partido de ayer. Según el interlocutor, identificado únicamente como David, los guardias de seguridad realizaron controles de bolsos y exigieron a todos los asistentes que se deshicieran de sus dispositivos de grabación.

“Había una presencia de seguridad bastante alta, y… de hecho, estaban haciendo controles de bolsos para asegurarse de que nadie había traído ningún tipo de dispositivo para grabar el partido más grande que un teléfono móvil. Los de seguridad me dijeron que habían tenido que pedirle a una persona que se negó a dejarlos mirar en su bolso que abandonara el recinto. Así que estaban tomando medidas contra la gente que intentaba filmar… porque los Flying Bats son un tema candente en los círculos futbolísticos estos días”, dijo David.

“West Pennant tenía una hinchada muy ruidosa… Al final del partido, cuando sonó el silbato final, deberías haber oído los abucheos procedentes de la grada de West Pennant Hills. Fue ensordecedor”, agregó.

West Pennant Hills Cherrybrook Football Club compartió ayer un mensaje de ánimo a sus jugadoras en Facebook después de la derrota.

“Nuestro equipo de Primera División Femenino lo dio todo en Christie Park esta tarde perdiendo 5-4 de manera desgarradora ante los Flying Bats”, decía el mensaje. “Encarnasteis todo lo que significa jugar para nuestro club durante 90 minutos de fútbol increíbles. ¡No podríamos estar más orgullosos de vosotras, chicas!”

Los comentarios en la publicación de Facebook fueron de apoyo total a las mujeres. “¡Bien hecho chicas! A ese equipo nunca se le debería haber permitido competir”, rezaba una de las respuestas. “Vuestras chicas son las ganadoras. No perdisteis, os robaron. Vergüenza debería darle a la federación de fútbol por permitir que esto suceda”, rezaba otra.

Según el reglamento presentado por la Asociación de Fútbol de Sídney Noroeste (NWSFA), “los jugadores pueden inscribirse y participar en función de su identificación de género”. Hay al menos nueve hombres que se dicen trans que juegan al fútbol en las ligas femeninas, aunque sus identidades han sido protegidas y ocultadas por los medios de comunicación australianos.

Imagen de Dennis en el campo durante la gran final del domingo, facilitada a Reduxx por un espectador.

Las directrices publicadas por la Comisión Australiana de Derechos Humanos establecen que, en virtud de la Ley Federal contra la Discriminación Sexual de 1984, las organizaciones deportivas tienen prohibido aplicar la “discriminación” por motivos de una identidad de género autodeclarada. “Un ejemplo de discriminación directa sería que una organización deportiva rechazara la solicitud de afiliación de una mujer trans por ser transgénero”, señalan las directrices.

En respuesta a las victorias aplastantes conseguidas por The Flying Bats FC, otros seis clubes de fútbol cuyos equipos femeninos habían competido contra ellos organizaron una reunión informal el 17 de marzo en el Hotel Ranch de North Ryde. La Asociación de Fútbol Sídney Noroeste se enteró de la conversación y programó una reunión formal. El CEO de la organización, Matthew Geracitano, envió un correo electrónico a los presidentes de los clubes con instrucciones para que asistieran a una reunión la tarde del 20 de marzo en Christie Park.

En el correo electrónico enviado a los presidentes de los clubes de fútbol se incluía un paquete titulado “Discurso de odio en línea” elaborado por la Comisión de eSeguridad. Sobre el archivo adjunto, la siguiente frase estaba resaltada en amarillo: “Si las personas responsables de publicar material gravemente perjudicial no cumplen con un aviso de eliminación, podemos solicitar sanciones civiles o multas contra los autores (de hasta 111.000 dólares)”.

Durante la reunión, a la que asistió el director ejecutivo de Football NSW (Fútbol de Nueva Gales del Sur), John Tsatsimas, se comunicó a los asistentes que la decisión de perder por abandono los partidos contra The Flying Bats conllevaría la adopción de «medidas disciplinarias».

Como ya reveló Reduxx, uno de los cinco hombres del equipo de fútbol femenino es el transactivista Riley Dennis, que ya había sido acusado de herir gravemente a mujeres (artículo en español) cuando jugaba en otro equipo femenino. Se pudo ver a Dennis vestido con el uniforme de los Flying Bats decorado con los colores de la bandera del Orgullo progresista, sacándoles una cabeza a las jugadoras durante el partido del domingo.

Dennis, nacido Justin, de 32 años, actualmente juega para The Flying Bats, pero el año pasado formó parte del equipo Inter Lions de Nueva Gales del Sur. El 21 de mayo de 2023, durante un partido entre los Inter Lions y el St. George en el torneo Majors Bay Reserve, Dennis lanzó a su oponente, mucho más baja, hacia una valla metálica mediante una entrada agresiva cuando los dos perseguían el balón.

Reduxx recibió imágenes del partido, en las que se veía a la jugadora tendida de lado, inmóvil, mientras el jugador transgénero se alejaba despreocupadamente.

El mes anterior, parece que Dennis había lesionado a otra jugadora, que supuestamente tuvo que ser hospitalizada a consecuencia de su lesión. Kirralie Smith, portavoz de Binary Australia, lanzó una campaña de envío de cartas, animando a las personas interesadas a ponerse en contacto con Football New South Wales, que según se informa, recibió más de 12.000 quejas (artículo en español).

Por su papel en la concienciación sobre las lesiones sufridas por las deportistas, Smith recibió la visita de la Policía de Nueva Gales del Sur (artículo en español) y se le impuso una Orden de Detención por Violencia el 30 de marzo de ese año que le exigía que no hablara ni se acercara a Dennis. Las autoridades retiraron la orden en septiembre, pero Smith sigue enfrentándose a continuos desafíos legales por haber identificado a algunos de los hombres que jugaban contra mujeres.

A principios de este año, Reduxx habló con el presidente del St. Patrick’s Football Club, Frank Parisi, quien reveló que al menos 20 jugadoras se habían autoexcluido (artículo en español) de este deporte, presumiblemente debido a preocupaciones de seguridad sobre las graves lesiones que ya habían ocurrido como resultado de la participación de hombres en partidos femeninos.

Parisi describió una serie de problemas surgido como resultado de que los hombres jugaran en partidos de fútbol femenino, así como un incidente en el que un hombre que se dice trans le rompió la pierna por dos sitios a una jugadora durante un partido. Las jugadoras se han autoexcluido del deporte por docenas, dijo Parisi, para evitar competir contra los jugadores masculinos.

“Hace un par de años, uno de los jugadores de The Flying Bats le rompió la pierna a una de nuestras jugadoras en un partido. Fue una entrada torpe por detrás. Nuestra jugadora acabó con la pierna rota por dos sitios y ya no juega al fútbol. Fue el resultado directo de un jugador muy malo, alto… no le sacaron tarjeta roja”, dijo Parisi.

Sin embargo, aunque el hombre que se dice trans que causó la lesión no fue sancionado, una jugadora que corrió a ayudar a la mujer lesionada fue suspendida por un comentario que hizo durante el incidente.

“Una de nuestras jugadoras se acercó corriendo para tratar de ayudarla, estaba gritando de tanto dolor. En ese momento, hizo un comentario despectivo al jugador de los Bats, por el que nos disculpamos. [Ella fue] suspendida. Al jugador de los Bats, no le pasó nada”. Parisi aclaró que tras este incidente, la jugadora fue sancionada ocho semanas sin jugar partidos.

En 2022, el año en que una jugadora del St. Patrick’s FC sufrió la rotura de una pierna a manos de un hombre que se dice trans relacionado con The Flying Bats, la presidenta del club de este último grupo, Jen Peden, fue galardonada con el premio Fair Play (Juego Limpio) otorgado por NWSFA, hecho que se anunció en la página de Facebook del club con el comentario: “Jugamos limpio”.

En marzo, se produjo una protesta pública masiva tras conocerse la noticia de los cinco jugadores que se dicen trans en el equipo WPL Flying Bats. En respuesta, LGBTI Rights Australia, una comunidad de Facebook con más de 250.000 seguidores, hizo una declaración pública (artículo en español) en la que se burlaba de las “nazis TERFas” y sugería que las “tránsfobas” deberían “entrenar un poco más”.


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ESCOCIA: Un drag queen coautor de una guía para “jóvenes trans” de una organización benéfica LGBT condenado por distribuir vídeos de abuso sexual a recién nacidos

Un drag queen escocés, coautor de una guía para “jóvenes trans” para una importante organización benéfica LGBT, ha sido condenado por distribuir abuso sexual infantil grabado. Andrew Easton, de Kennethmont, Huntly, se libró de una pena inmediata de prisión a pesar de comunicarse a sabiendas en línea con un niño de 13 años y pedirle imágenes indecentes.

Easton, de 39 años, se declaró culpable este mes ante el tribunal de comunicarse en línea con alguien que creía que era un niño, descargar imágenes indecentes de menores y distribuir imágenes indecentes de menores. En el material de abuso sexual, que incluía imágenes y vídeos, aparecían bebés recién nacidos, criaturas muy jóvenes y menores prepúberes. Easton fue atrapado por una de las unidades nacionales de Prevención de Abuso Infantil en Línea (NOCAP) de Escocia en una operación encubierta realizada en septiembre de 2023 en la que se identificó su número de IP. La policía obtuvo entonces una orden de registro y allanó el domicilio de Easton.

En un chat de Telegram titulado “Extra Excitement”, Easton tenía 132 imágenes y 1.119 vídeos de recién nacidos y menores de 10 años. La policía descubrió que Easton también tenía un registro de chat con un usuario que decía tener 13 años; Easton se refería a este usuario como “bebé” y le enviaba fotos de sus genitales. También le pidió al usuario que lo llamara “papi”.

En su comparecencia ante el Tribunal de Aberdeen el 13 de agosto, Easton no negó haber descargado y compartido abusos sexuales infantiles grabados. Pero a pesar de su admisión, se ha librado de la cárcel y, en su lugar, fue condenado a 200 horas de servicio comunitario no remunerado y tres años de supervisión.

Easton fue sentenciado por la sheriff Morag McLaughlin, quien dijo al tribunal que los crímenes de Easton “no alcanzaban el umbral para una sentencia de prisión”.

Aunque la noticia de la condena de Easton se supo por primera vez el 13 de agosto, el interés en su caso se ha renovado después de que la periodista Marion Scott revelara que Easton había trabajado anteriormente con LGBT Youth Scotland. La organización benéfica fue denunciada por Reduxx en 2022 (artículo en español) por participar en el presunto grooming y explotación sexual de dos menores de edad que habían accedido a sus servicios.

Según Scott, Easton fue coautor de la “guía de salida del armario” de la organización benéfica para “jóvenes trans”, que se distribuyó a las escuelas públicas de todo el país y que todavía está disponible en el sitio web del Ayuntamiento de East Ayrshire. La guía, que promociona fuertemente los servicios de LGBT Youth Scotland, “analiza las diversas etapas del proceso de salida del armario” en un tono accesible para la juventud, presentando diferentes escenarios y consideraciones para aquellos menores interesados en cambiar su identidad de género.

Al final del documento aparece una foto de Easton y de los otros coautores de la guía.

Aunque Easton ha eliminado la mayoría de sus perfiles de redes sociales, en su página ahora borrada de Facebook, también admitió haber recaudado fondos para esa organización financiada por el gobierno, afirmando que su “misión significa mucho para [él]”. También se ha descubierto que gestionaba una pequeña cuenta en X en la que se refería a sí mismo como “Annabelle Ende” y donde se vestía de drag.

En su prolífica cuenta de GoodReads, Easton expresa un interés particular por la ficción erótica gay, y muchos de sus títulos favoritos se centran en las relaciones sexuales entre chicos adolescentes o entre chicos adolescentes y hombres adultos. En uno de ellos, un niño de 14 años desarrolla una relación incestuosa con su tío.

Inquietantemente, Easton no es el primer pederasta que se ha confirmado que tiene una conexión con LGBT Youth Scotland. En 2009, el entonces director ejecutivo de la organización benéfica, James Rennie, fue declarado culpable de operar la mayor red de pederastia del país y de abusar sexualmente del bebé de unos amigos, al que cuidaba desde los tres meses de edad. La organización benéfica nunca fue investigada por la policía.

El gobierno y la policía escoceses fueron criticados por no investigar a LGBT Youth Scotland después del juicio del ex director ejecutivo Rennie. La organización, por su parte, emitió un comunicado de prensa tras la exposición de Reduxx de 2022, en el que afirmaba no haber cometido delito alguno.

“Para mayor claridad, y contrariamente a los comentarios en línea, no hay, ni ha habido, una investigación policial en relación con las recientes acusaciones en los medios de comunicación sobre LGBT Youth Scotland o cualquier miembro de nuestro personal o equipo de voluntarios. Como buena práctica, y en línea con nuestras políticas internas, también llevamos a cabo una investigación interna sobre las acusaciones y todos los procesos de salvaguardia llevados a cabo en el momento de las acusaciones. No encontramos evidencia de falta de salvaguarda”, rezaba el comunicado.

Sam Cowie, un joven que había contado a Reduxx que fue captado y explotado cuando accedía a los servicios de LGBT Youth Scotland, ha expresado su indignación por las últimas noticias sobre Easton. Cowie dijo en X que el gobierno debe dejar de una vez de financiar esa organización benéfica.

“El gobierno escocés continúa financiando una organización que tenía un director ejecutivo pederasta, que tenía miembros del personal que me hicieron grooming y ahora @ladymcbeth2 ha expuesto que OTRO pederasta trabajó con ellos después del escándalo de James Rennie. Los LGBTYS deben desaparecer. #defundLGBTYS“, publicó.

Según la policía escocesa, en enero de 2024 había 5.066 delincuentes sexuales registrados viviendo en comunidades de todo el país. Los nombres de los delincuentes registrados no se publican para proteger su anonimato.

Según el sitio web de la policía: “Los delincuentes sexuales registrados son objeto de una gestión rigurosa por parte de la policía y nuestros socios a través de los mecanismos de protección pública multiinstitucionales, y están sujetos a una evaluación y gestión exhaustivas de riesgo en la comunidad. La Policía de Escocia cuenta con unidades de agentes especialmente entrenados y dedicados a esta tarea”.

LGBT Youth Scotland no ha respondido a una solicitud de comentarios en el momento de la publicación de este artículo.


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AUSTRALIA: Women’s Football Team with FIVE Trans-Identified Males Win Grand Final Amid “High Security” Camera Bans

An Australian “trans inclusive” Premier League women’s football team with five male players has secured victory in the grand final match after dominating games throughout the summer. During the 2024 season of the North West Sydney Football Women’s Premier Competition, The Flying Bats won all 17 games and scored 76 goals while only a total of 8 points were scored against them.

The Flying Bats, a football club for “self-identified women and non-binary people,” has attracted significant criticism that has escalated over the past year. The mounting outcry presumably motivated the decision by regulators to ramp up security measures during the Women’s Premier League grand final game on Sunday, which they won, 5-4, over West Pennant Hills Cherrybrook Football Club.

Earlier this year the team was awarded a $1,000 prize after winning the North West Sydney League pre-season Beryl Ackroyd Cup, following a season of winning every game they played in the Women’s Premier League matches, 10-0. The news generated significant outcry and resulted in The Flying Bats making international headlines.

Australian talk radio presenter Ben Fordham spoke with one of the attendees at yesterday’s match. According to the caller, identified only as David, security guards conducted bag checks and required all who attended to ditch their recording devices.

“There was quite a high security presence up there, and… they were actually doing bag checks to make sure no one had brought in any sort of device to film the game any bigger than a mobile phone. I was told by security that they’d had to ask one person who refused to let them into their bag to leave the premises. So they were clamping down on people there trying to take footage… because The Flying Bats are a hot topic in football circles these days,” David said.

“West Pennant had a really vocal crowd up there… At the end of the game, when the full-time whistle went, you should have heard the boos coming from the West Pennant Hills crowd section. It was deafening,” he added.

West Pennant Hills Cherrybrook Football Club shared an encouraging message to their female athletes on Facebook yesterday after the loss.

“Our Premier Leauge Womens team have left everything on Christie Park this afternoon losing 5-4 in heartbreaking fashion to the Flying Bats,” the post read. “You embodied everything it means to play for our club over an amazing 90 mins of football. We could not be prouder of you girls!”

Comments on the Facebook post were entirely supportive of the women. “Well done ladies! That team should never been allowed to compete,” read one response. “Your girls are the winners here. [You] didn’t lose, [you] were robbed. Shame on the soccer federation for letting this happen,” read another.

According to regulations put forward by the North West Sydney Football Association (NWSFA), “players may register and participate on the basis of their gender identification.” There are a total of at least nine trans-identified males playing football within the women’s leagues, though their identities have been protected and withheld by Australian media.

Image of Dennis on the field during Sunday’s grand final, provided to Reduxx by a spectator.

Guidelines issued by the Australian Human Rights Commission state that under the federal Sex Discrimination Act 1984, sporting organizations are forbidden from enforcing “discrimination” on the basis of a self-declared gender identity. “An example of direct discrimination would be a sporting organization refusing a trans woman’s application for membership because she is transgender,” the guidelines state.

In response to landslide victories secured by The Flying Bats FC, six other football clubs whose women’s teams had competed against them organized an informal meeting on March 17 at the Ranch Hotel in North Ryde. The Northwest Sydney Football Association became aware of the conversation and scheduled a formal meeting. An email was sent out to the club presidents from the CEO of North West Sydney Football, Matthew Geracitano, instructing them to attend a meeting on the evening of March 20 at Christie Park.

Included in the email sent to football club presidents was a packet titled “Online Hate Speech” produced by the eSafety Commission. Above the attachment, the following sentence was highlighted in yellow: “If individuals responsible for posting seriously harmful material do not comply with a removal notice, we can seek civil penalties or fines against perpetrators (up to $111,000).”

During the meeting, which was attended by CEO of Football NSW John Tsatsimas, attendees were told that a decision to boycott participation by forfeiting matches against The Flying Bats would result in “disciplinary action” being issued.

As previously revealed by Reduxx, one of the five men on the women’s football team is trans activist Riley Dennis, who was previously accused of severely injuring women while participating on another women’s team. Dennis could be seen towering over the female players during Sunday’s game, while wearing the Flying Bats uniform decorated with colors from the Pride progress flag.

Dennis, born Justin, 32, currently plays for The Flying Bats, but last year was a member of the Inter Lions team in New South Wales. On May 21, 2023, during a game between the Inter Lions and the St. George football clubs at the Majors Bay Reserve, Dennis launched his smaller female opponent towards a metal fence using an aggressive tackle as the two chased down the ball.

Reduxx was provided footage of the match, which showed the female player laying on her side, unmoving, as the transgender player casually walked away.

The month prior, Dennis was said to have injured another female player, who reportedly had to seek hospital attention as a result of her injury. A letter-writing campaign was launched by Kirralie Smith, a spokeswoman with Binary Australia, encouraging concerned individuals to contact Football New South Wales, which reportedly then received over 12,000 submissions.

For her role in bringing awareness to the injuries sustained by female athletes, Smith was visited by New South Wales Police and handed an Apprehended Violence Order (AVO) on March 30 that year requiring that she neither discuss nor approach Dennis. The AVO was withdrawn by authorities in September, but Smith continues to face ongoing legal challenges for having identified some of the men playing against women.

Earlier this year, Reduxx spoke with president of St. Patrick’s Football Club Frank Parisi, who revealed that at least 20 female players had excluded themselves from the sport, presumably due to safety concerns over serious injuries that had already occurred as a result of male participants in women’s matches.

Parisi described a range of problems that had arisen as a result of men playing in women’s football matches, as well as an incident in which a female player’s leg was broken in two places by a trans-identified male during a game. Female players have been self-excluding from the sport by the dozens, said Parisi, in order to avoid competing against the male players.

“A couple of year ago, one of The Flying Bats players broke one of our players’ legs in a game. It was a clumsy tackle from behind. Our player had her leg broken in two places and she’s no longer playing football. It was a direct result of a real bad, tall player… he didn’t get a red card,” Parisi said.

However, while the trans-identified male who caused the injury was not penalized, one female player who rushed to help the injured woman was suspended for a comment she made during the incident.

“One of our players rushed over to try to help her, she was screaming in so much pain. At that time, she made a derogatory remark to the Bats player, which we apologized for. [She was] suspended. The Bats player, nothing happened to [him].” Parisi clarified that following this incident, the player was suspended from matches for a total of eight weeks.

In 2022, the year in which a female player for St. Patrick’s FC had her leg broken by a trans-identified male associated with The Flying Bats, club president for the latter group, Jen Peden, was honored with a Fair Play award presented by the NWSFA – a fact announced to the club’s Facebook page with the comment, “We play nice.”

In March, massive public outcry ensued after news broke of the five trans-identified players on The Flying Bats team. In response, LGBTI Rights Australia, a Facebook community with over 250,000 followers, made a public statement mocking “TERF Nazis” and suggesting that “transphobes” should “train a bit harder.”


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ALEMANIA: Político travesti pide que se encarcele a los progenitores que no “afirmen” la transición de género de sus hijas e hijos

Un diputado travesti alemán que se dice trans pide que se procese y encarcele a los progenitores que no cumplan con la “transición de género” de sus hijos e hijas. Markus “Tessa” Ganserer, que representa al Partido Verde como “mujer”, se dirigió recientemente a la comunidad queer y también prometió que se prohibirían completamente “tratamientos de conversión” no especificados.

Contraviniendo todas las advertencias de los terapeutas, el gobierno federal alemán aprobó en 2020 una ley que prohíbe las terapias de conversión e incluyó dentro de la legislación el concepto de “identidad de género”.

“Esta ley se aplica a todos los tratamientos realizados en seres humanos que tengan como objetivo cambiar o suprimir la orientación sexual o la identidad de género autopercibida”. La infracción se castiga con hasta un año de prisión o una multa.

Hasta ahora, los progenitores estaban exentos de ser procesados en virtud de esta ley, siempre que no violaran gravemente su deber de cuidado, pero los transactivistas están presionando al gobierno para que elimine esa excepción, de modo que los progenitores puedan ser castigados si intentan proteger a su hijo o hija de la “transición” social o médica, que puede implicar la prescripción de medicamentos para detener la pubertad o cirugías.

Ya en 2020, “la ley establecía de facto que todos los terapeutas tienen ahora que tratar ‘transafirmativamente'”, explica el psiquiatra infantil y de adolescentes Alexander Korte en Emma Magazine. También sabe de muchos terapeutas infantiles y de adolescentes que ya se han retirado de la profesión, pues temen ser acusados y procesados por hacer terapia de conversión si no afirman la identidad de género autopercibida de sus jóvenes pacientes.

Alemania también aprobó recientemente una de las Leyes de Autodeterminación (SBGG) de mayor alcance del mundo, que entrará en vigor en noviembre. La ley, que fue abrumadoramente criticada por los defensores de los derechos de las mujeres, estableció la “identidad de género” como característica protegida y permite a los progenitores cambiar el marcador de sexo en los documentos de sus hijos e hijas desde el momento mismo de su nacimiento (artículo en español). La SBGG también establece la posibilidad de que se multe a los ciudadanos con hasta 10.000 euros (unos 10.800 dólares estadounidenses) por revelar el nombre de pila y el sexo de nacimiento de una persona sin su permiso, una acción a la que los transactivistas se oponen firmemente y a la que se refieren como “deadnaming” (“nombre muerto”).

Pero Ganserer, que fue padre de dos vástagos antes de declararse “mujer”, había expresado fuertes críticas a la SBGG, afirmando que no va lo suficientemente lejos como para castigar a los acusados de “transfobia”.

Ganserer también ha dicho que no está satisfecho con un apartado del proyecto de ley que requiere que los progenitores den su consentimiento para cambiar el sexo legal de sus vástagos en los documentos de identidad. En su opinión, se debería permitir que los y las menores modifiquen su sexo legal a partir de los 14 años, sin el consentimiento de sus progenitores.

Ganserer es conocido por su controvertida imagen pública, y suscita a menudo la indignación de sus críticos por su comportamiento exhibicionista. Ha sido criticado por la vestimenta que eligió para hablar en el Bundestag alemán, un “picardías” negro de encaje transparente. También ha sido fotografiado desnudo en una sauna de mujeres con la peluca puesta, y ha afirmado que el pene no es un órgano sexual masculino.

Cuando hacía campaña para conseguir un puesto en el Bundestag como miembro del Partido Verde, Ganserer contó a Buzzfeed que le robaba la ropa a su mujer y que se sintió “como un crío” al descubrirse en el espejo por primera vez antes de comenzar a reclamar una identidad trans. Cuando Ganserer, cuyo nombre de nacimiento es Markus, fue finalmente elegido diputado al parlamento alemán en septiembre de 2021, ocupó un escaño que estaba reservado para la representación política femenina.

El último impulso de Ganserer para que los progenitores sean procesados por no “validar” la identidad de género de sus hijos e hijas hace referencia a un acuerdo informal de 2021 del gobierno federal alemán para eliminar la exención de procesamiento para los progenitores. Debido a que el país celebra elecciones el próximo año, los transactivistas han estado presionando al gobierno para que consagre el acuerdo como ley.

Como resultado, varias organizaciones políticas “queer” han presentado un documento de demanda al gobierno citando una encuesta en línea que afirma que los progenitores son responsables de la mayoría de los “tratamientos de conversión”. La encuesta, que no se ha hecho pública, clasificaba una amplia gama de comportamientos como intentos de “terapia de conversión”, incluidas las recomendaciones de padres y madres de que sus vástagos participen en actividades codificadas como masculinas o femeninas.

La feminista y activista por los derechos de las mujeres Rona Duwe ha solicitado la encuesta en línea completa con cuestionarios, escenarios de estudio, participantes, metodología de evaluación, cifras y datos al Centro Federal de Educación para la Salud basándose en la Ley de Libertad de Información. Sin embargo, se ha protegido su publicación, alegando los autores derechos de autor y de primera publicación.

A pesar de las dudas sobre la validez de la encuesta, políticos como Jürgen Lenders, del FDP (Partido de los Demócratas Libres), ya están pidiendo que se cambien las leyes actuales. Lenders ha sugerido que se establezcan “puntos de denuncia” donde los y las menores puedan presentar quejas contra sus propios progenitores o exigir que se le retire el estatus de organización benéfica sin fines de lucro a aquella que no valide su identidad de género.

Una de las organizaciones que han respaldado el llamado documento de demanda es la Fundación Federal Magnus Hirschfeld. Helmut Metzner, director general de la fundación, se refirió a la encuesta en línea como prueba de que los progenitores deben ser considerados legalmente responsables por no validar la identidad de género elegida por sus hijos e hijas.

“Los estudios actuales muestran claramente que los tratamientos de conversión siguen representando un problema relevante en Alemania. El Gobierno federal debe cumplir su promesa (…) antes de las próximas elecciones federales. (…) Los tratamientos de conversión son dañinos y deben prohibirse de una vez por todas en la sociedad”, afirmó Metzner.

Otro de los cofirmantes es el proyecto juvenil Lambda, financiado por el estado, que, como ya reveló Reduxxpromueve el “juego de la edad”, el fetichismo de pañales y el BDSM en una publicación co-diseñada por menores (artículo en español).


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SCOTLAND: Drag Queen Who Co-Authored “Trans Youth” Guide For LGBT Charity Convicted Of Distributing Sexual Abuse Videos Of Newborn Babies

A Scottish drag queen who co-authored a guide for “trans youth” for a major LGBT charity has been convicted of distributing child pornography. Andrew Easton, from Kennethmont, Huntly, was spared an immediate prison sentence despite knowingly communicating online with a 13-year-old boy and asking him for indecent images.

Easton, 39, pleaded guilty in court this month to communicating online with someone he believed to be a child, downloading indecent images of children, and distributing indecent images of children. The sexual abuse materials, which included images and videos, featured newborn babies, toddlers, and prepubescent children. Easton was first caught by one of Scotland’s National Online Child Abuse Prevention (NOCAP) units in a September 2023 sting that identified his IP number. Police then obtained a search warrant and raided Easton’s home. 

In a Telegram chat labeled “Extra Excitement,” Easton hoarded 132 images and 1,119 videos with newborn infants and children up to age 10. Police found that Easton also had a chat log with a user claiming to be 13 years old; Easton referred to this user as “baby boy,” and sent him photos of his genitals. He also requested the user call him “daddy.”  

Appearing at Aberdeen Sheriff Court on August 13, Easton did not deny that he had downloaded and shared child pornography. But despite his admission, he has avoided prison and was instead sentenced to 200 hours of unpaid community service and three years of supervision.

Easton was sentenced by Sheriff Morag McLaughlin, who said in court that Easton’s crimes “don’t quite reach the threshold for a prison sentence.”

While news of Easton’s conviction first broke on August 13, interest in his case has been renewed after it was revealed by journalist Marion Scott that Easton had previously worked with LGBT Youth Scotland. The charity was exposed by Reduxx in 2022 for participating in the alleged grooming and sexual exploitation of two minor boys who had been accessing their services.

According to Scott, Easton co-authored the charity’s “coming out guide” for “trans young people” which was distributed to public schools across the country and is still available on the East Ayrshire Council website. The guide, which heavily promotes LGBT Youth Scotland services, “looks at the various stages of the coming out process” in a youth-accessible tone, presenting different scenarios and considerations for minors interested in changing their gender identity.

A photo of Easton and the guide’s other co-authors is featured at the end of the document.

While Easton has scrubbed the majority of his social media profiles, on his now-deleted Facebook, he also admitted to fundraising for the government-funded organization, claiming that their “mission means a lot to [him].” He has also been found to have operated a small X account where he referred to himself as “Annabelle Ende” and dressed in drag.

On his prolific GoodReads account, Easton expresses a particular interest in gay erotic fiction – with many of his favorited titles focusing on sexual relationships between teen boys or teen boys and adult men. In one, a 14-year-old boy develops an incestuous relationship with his uncle.

Disturbingly, Easton is not the first pedophile who has been confirmed to have a connection to LGBT Youth Scotland. In 2009, the charity’s then-CEO, James Rennie, was found guilty of operating the country’s largest pedophile network and sexually abusing his friends’ infant that he would babysit from three months of age. The charity was never investigated by police.

Scottish government and police were criticized for failing to investigate LGBT Youth Scotland following former CEO Rennie’s trial. The organization, meanwhile, issued a press statement following the 2022 Reduxx exposè, claiming no wrongdoing.

“For clarity, and contrary to commentary online, there is not, and has not been, a police investigation in relation to recent allegations in the media into LGBT Youth Scotland or any members of our staff or volunteer team. For good practice, and in line with our internal policies, we also conducted an internal investigation into the allegations and all safeguarding processes conducted at the time of the allegations. We found no evidence of a lack of safeguarding,” the statement read.

Sam Cowie, a young man who previously told Reduxx he was groomed and exploited while accessing LGBT Youth Scotland, has expressed outrage at the latest news on Easton. Taking to X, Cowie said the charity must finally be defunded by the government.

“The Scottish Government continues to fund an organisation that had a paedophile CEO, that had staff members groom me and now @ladymcbeth2 has exposed that ANOTHER paedophile worked with them after the James Rennie scandal. LGBTYS must go #defundLGBTYS,” he posted.

According to the Scottish police, there were 5,066 registered sex offenders (RSO) living in communities across the country in January 2024. Names of registered offenders are not published in order to protect their anonymity.

According to the police website: “RSOs are robustly managed by the police and our partners through the Multi-agency public protection arrangements, and subject to comprehensive risk assessment and risk management in the community. Police Scotland has units of dedicated officers specially trained for this task.”

LGBT Youth Scotland has not responded to a request for comment at the time of publication. 


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GERMANY: Transgender Politician Calls For Parents To Be Imprisoned If They Do Not “Affirm” Their Child’s Gender Transition

A trans-identified member of Germany’s Parliament is calling for parents who do not comply with their child’s “gender transition” to be prosecuted and imprisoned. Markus “Tessa” Ganserer, who represents the Green Party as a “woman,” recently addressed the queer community and also promised that broadly-defined “conversion treatments” would be completely banned.

Contrary to all warnings from therapists, the German federal government passed a law banning conversion therapy in 2020 and included within the legislation the concept of “gender identity.”

“This law applies to all treatments performed on humans that are aimed at changing or suppressing sexual orientation or self-perceived gender identity.” Violation is punishable by up to one year in prison or a fine. 

Parents have so far been exempt from being prosecuted under this law, provided they do not grossly violate their duty of care, but trans activists are pressuring the government to remove the exception for parents so that they can be punished if they try to protect their child from social or medical “transitioning,” which can involve the prescription of puberty-halting drugs or surgery.

As early as 2020, “It was de facto written into the law that all therapists now have to treat ‘transaffirmatively,'” explains child and adolescent psychiatrist Alexander Korte at Emma Magazine. He is also aware of many child and adolescent therapists who have already withdrawn from the field, as they are frightened of being charged with, and prosecuted for, conversion therapy should they not affirm the self-perceived gender identity of a young patient. 

Germany also recently passed one of the world’s most far-reaching Self-Determination Acts (SBGG), which comes into effect in November. The law, which was met by overwhelming backlash by women’s rights campaigners, established “gender identity” as a protected characteristic and allows parents to change the sex marker on their children’s documents from birth. The SBGG also creates the potential for citizens to be fined up to €10,000 (approx. $10,800 USD) for revealing a person’s given name and birth sex without their permission – an action that trans activists staunchly oppose and refer to as ‘deadnaming.’

But Ganserer, who fathered two children before claiming to be a “woman,” had expressed strong criticisms of the SBGG, claiming it does not go far enough to punish those accused of “transphobia.”

Ganserer has also said that he is not satisfied with a section of the bill which requires parents to consent to changing the legal sex of their children on identification documents. In his opinion, children should be permitted to alter their legal sex beginning from the age of 14, without parental consent.

Ganserer is known for his controversial public persona, and routinely prompts outrage from his critics for his exhibitionistic behavior. He has been slammed for his choice of dress when speaking in the German Bundestag, where has has worn a black transparent lace “negligee.” He has also been photographed naked in a women’s sauna while wearing a wig, and has claimed that a penis is not a male sexual organ.

While campaigning for a position in the Bundestag as a member of the Green Party, Ganserer told Buzzfeed that he stole his wife’s clothes and felt “like a child” discovering himself in the mirror for the first time before he started claiming a trans identity. When Ganserer, whose birth name is Markus, was ultimately elected to Germany’s parliament in September of 2021, he took a seat that was reserved for female political representation.

Ganserer’s latest push to have parents prosecuted for not “validating” their child’s gender identity refers to a 2021 informal agreement by the German federal government to remove the prosecution exemption for parents. Because the nation holds its elections next year, trans activists have been putting pressure on the government to enshrine the agreement into law.

As a result, several “queer” political organizations have submitted a demand paper to the government citing an online survey that claims parents are responsible for the majority of “conversion treatments.” The survey, which is being withheld from public release, classified a broad array of behavior as attempts of “conversion therapy,” including recommendations from parents that their children take part in male or female-coded activities.

Feminist and women’s rights activist Rona Duwe has requested the complete online survey with questionnaires, study settings, participants, evaluation methodology, figures and data from the Federal Center for Health Education within the framework of the Freedom of Information Act. However, it has been protected from publication, with the authors citing copyright and first publication rights.

Despite questions surrounding the survey’s validity, politicians such as Mr. Jürgen Lenders of the FDP are already calling for current laws to be changed as a result. Lenders has suggested “reporting points” be established where children can file complaints against their own parents or demand the non-profit status of charities be removed if one does not validate their gender identity.

Of the organizations that have endorsed the so-called demand paper is the Federal Magnus Hirschfeld Foundation. Helmut Metzner, the foundation’s Managing Director, referred to the online survey as proof that parents must be held legally responsible for not validating their child’s chosen gender identity.

“The current studies clearly show that conversion treatments continue to represent a relevant problem in Germany. The federal Government must keep its promise (…) before the next federal election. (…) Conversion treatments are harmful and should be banned from society once and for all,” Metzner said.

Another co-signatory is state-funded youth project Lambda, which, as previously revealed by Reduxx, promotes “age play,” diaper fetishism and BDSM in a publication co-designed by minors.


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ESPAÑA: Un ertzaina es acusado “como mujer” de intentar asesinar a su esposa e hijas al haber cambiado su sexo registral

Un miembro de la fuerza policial del País Vasco ha sido arrestado por intentar asesinar a su esposa frente a las dos hijas de la pareja. Después del horrible crimen, la familia se enteró de que el hombre había cambiado su sexo registral en un aparente intento de evitar penas más severas por violencia de género.

El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco ha confirmado que el ataque tuvo lugar en San Sebastián la madrugada del sábado. El hombre amenazó con hacer daño a sus hijas, una de las cuales es un bebé, antes de agarrar un cuchillo de cocina “de dimensiones considerables” e intentar agredir con él a su esposa. Afortunadamente, la mujer pudo localizar un espray de gas pimienta que había en la casa y lo usó para defenderse a sí misma y al bebé rociando a su marido en la cara. Luego cogió al bebé y huyó, pero no antes de que él tomara a la otra niña como rehén.

La mujer salió corriendo hacia la cárcel de Martutene, situada muy cerca de su casa, y contó lo ocurrido a los agentes apostados en el exterior de la cárcel. Inmediatamente, patrullas de la Ertzaintza, se dirigieron al domicilio, donde el hombre se había atrincherado con la hija mayor y amenazaba con hacerle daño.

Los policías lograron acceder a la vivienda y, tras comprobar que la niña estaba bien, detuvieron a su compañero como presunto autor de un intento de homicidio.

Tras pasar a disposición judicial, el agente, que se encontraba de baja médica, fue puesto en libertad con medidas cautelares y con la obligación de comparecer cuando sea requerido por la autoridad judicial.

Según El Correo, el detenido solicitó ser tratado de acuerdo con los protocolos establecidos para los arrestos de mujeres. Y es que, sin que ni su familia ni nadie de su entorno lo supieran, el agresor se había cambiado de sexo registral el pasado noviembre, y ahora figura como mujer en el Registro Civil. 

Aunque no está confirmado, se especula con que el hombre cambió su sexo legal para evitar ciertas sanciones por la violencia doméstica a la que llevaba tiempo sometiendo a su esposa e hijas.

En España, los hombres que agreden o asesinan a mujeres pueden ser acusados de “violencia de género”, un delito específico que surgió en España para hacer frente a la abrumadora lucha del país contra el feminicidio y la violencia doméstica. El delito reconoce una diferencia de fuerza entre hombres y mujeres, y da derecho a las víctimas femeninas a ciertos recursos, como la presentación de procedimientos de separación, custodia u otros factores.

Como el detenido había cambiado su marcador legal de sexo antes de cometer el delito, la única opción que quedaba era acusarlo de violencia doméstica, una categoría más amplia de agresión de pareja. Tanto la violencia de género como la violencia doméstica son asuntos penales similares, pero esta última elimina la distinción del ejercicio de poder del hombre sobre la mujer.

La Fiscalía está investigando el caso, y puede pedir al juzgado común que se inhiba del caso para que éste pase a un Juzgado de Violencia sobre la Mujer, pero para ello el Ministerio Público tiene que probar que se produjo un cambio de sexo registral fraudulento y, si es así, pedir su anulación

Uno de los indicios a los que podría aludir la Fiscalía para probar ese cambio fraudulento es que la persona denunciada se habría limitado a cambiar de sexo en el Registro, manteniendo tanto su aspecto como su nombre de varón y sin siquiera haber informado a su entorno de este cambio.

Este es el segundo caso en el último mes en el que un hombre en España cambia su sexo registral en un aparente intento de evitar penas más severas por delitos contra las mujeres.

Como ya informó Reduxx el 14 de agosto (artículo en español), una víctima de violencia doméstica en Galicia, se llevó una sorpresa al enterarse de que su marido maltratador había cambiado su sexo registral, protegiéndolo así de ciertos cargos asociados con la violencia masculina contra las mujeres. La historia salió a la luz a finales de julio en la pequeña localidad de Redondela, al noroeste del país.

Cuando los agentes fueron a arrestar al hombre, él se jactó de que “ahora era mujer” y les mostró sus documentos de identidad para probarlo. No había cambiado su nombre legal ni su apariencia.

Casos similares han surgido continuamente en los últimos dos años (artículo en español) a medida que crece en todo el país la preocupación por el “fraude trans”, que consiste en hombres que cambian su marcador de sexo en el registro simplemente para obtener beneficios legales o profesionales (artículo en español).

El “fraude trans” parece tener su origen en los recientes cambios en la legislación española que relajaron significativamente las normas relativas a la obtención de cambios en los documentos legales. En febrero de 2023, el gobierno español promulgó lo que coloquialmente se conoce como la “Ley Trans”, que instituyó una política de “no hacer preguntas” para quienes declararan ser transgénero. La ley facilitó que las personas cambiaran su nombre y sexo registral, acelerando el proceso para los solicitantes y eliminando cualquier requisito médico o diagnóstico previo.

Desde la entrada en vigor de la ley, en España se ha producido una explosión de hombres que cambian su sexo registral mientras mantienen su nombre y apariencia “masculinos”.

Los cambios parecen estar motivados no sólo por el deseo de evitar sanciones penales, sino también para obtener beneficios financieros.

Como ya informó Reduxx (artículo en español), en Ceuta, una pequeña ciudad autónoma española situada en la costa norteafricana, se sabe que 37 funcionarios varones han cambiado su sexo registral para obtener prestaciones asignadas a las mujeres. La mayoría de estos hombres no se cambian de nombre y mantienen una apariencia “masculina”.


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