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Nueva York: Violentos transactivistas arrestados durante una manifestación a favor de las mujeres

By
Genevieve Gluck
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Lo que pretendía ser una manifestación pacífica organizada por mujeres críticas con la ideología de género se tornó violenta el lunes cuando transactivistas se congregaron para oponerse al derecho de las mujeres a la libertad de expresión.

Al menos nueve personas fueron arrestadas en Manhattan durante las protestas que estallaron en oposición al evento Let Women Speak (Dejad Hablar a las Mujeres). El evento es la última parada de la gira por Estados Unidos organizada por activistas de base por los derechos de las mujeres y con la participación de la conocida defensora de las mujeres británica Kellie-Jay Keen, fundadora de Standing for Women.

LUNES 14/11, 12PM en CITY HALL PARK: acércate y ahoga el odio que conocidas militantes anti trans están escupiendo en la ciudad de Nueva York.
¡Trae carteles, pancartas, banderas, matracas, trombones, vuvuzelas y a todos tus amigos! 👯 ¡Sé creativo y audaz! 💖 ¡echamos a las TERFS + fascistas a patadas! 🚫

Antes de que el evento pudiera comenzar formalmente, Keen anunció a través de YouTube que no podía asistir porque no conseguía llegar al podio de manera segura. Keen explicó que la policía no estaba dispuesta a proporcionarle una escolta al sitio donde otras manifestantes se habían reunido a las puertas del Ayuntamiento para que pudiera pasar a través de la multitud de detractores de manera segura.

Decenas de miembros de Antifa y activistas trans se habían reunido alrededor de las oradoras, lo que obligó a las autoridades a poner barricadas para separar a los dos grupos. Según Keen, un policía inicialmente se había ofrecido a ayudarla, pero luego decidió no hacerlo, diciendo que no se “arriesgaría” a poner a otros policías en peligro al facilitar aún más el evento.

Al tiempo que otras oradoras intentaban continuar, dando discursos apasionados sobre el impacto de la ideología de género en la protección de los niños y los derechos de las mujeres, la congregación de manifestantes pro-trans se agitaba cada vez más. En un video que circula en las redes sociales, se puede ver a activistas trans empujando contra las barricadas mientras la policía retrocede, apenas capaz de contener a la multitud hostil.

Activistas de izquierda y de antifa intentan atravesar la barrera del mitin “Stop Female Erasure”, la policía de Nueva York los detiene con dificultad.

En otros clips del evento, se pueden ver a activistas trans enfrentándose con guardias de seguridad y fuerzas del orden mientras intentan romper las barricadas. Según el New York Post, la policía comenzó a arrestar a los contramanifestantes, y 9 personas en total fueron detenidas. Aún no se ha publicado información más detallada, ni si se han presentado cargos.

Durante uno de los incidentes más virales que surgieron del evento, dos personas transgénero influencers y modelos fueron vistas lanzando amenazas a Jeanna Hoch, una mujer de Colorado que ya había sido atacada por miembros de Antifa.

El hombre transidentificado Amara Gisele Jones Velásquez, antes conocido como Anthony Martucci, intentó amenazar e insultar a Hoch una y otra vez, diciendo: “¡Te voy a dar una paliza, zorra! ¡Estas manos no discriminan!”

Velásquez es modelo en Nueva York, y ha trabajado en campañas para Pride NYC y Coach.

Me parece de locos que piensen que se están ganando a alguien con una muestra tan chabacana y asquerosa de agresión masculina.

“Estas tetitas son más reales de lo que tú nunca serás, zorra. ¡Ningún hombre te desea!” Agregó, antes de agarrarse el pecho expuesto en un gesto lascivo. Más tarde, cuando las activistas por los derechos de las mujeres salían del evento escoltadas por la policía y los guardias de seguridad, Velásquez se acercó furioso a Hoch y fue filmado tratando de escupirla varias veces.

Como señaló un participante en el evento, las mujeres habían ideado la estrategia de abandonar el área en grupos de cuatro o cinco para evitar ser agredidas por activistas trans al separarse.

La modelo transidentificada Casil McArthur, que estaba junto a Velásquez mientras amenazaba a Hoch, cantaba “escoria nazi” a las mujeres. McArthur comenzó a trabajar de modelo a la edad de diez años, usando el nombre de Dani Rose, pero empezó a inyectarse testosterona para hacer la transición médica a la edad de 17 años.

En una publicación de Instagram de 2016, McArthur revela que se sentía insegura sobre su cuerpo y sus senos en particular. “Estaba súper indecisa con una foto como esta”, McArthur subtituló una foto de sí misma de pie en topless, con los brazos cruzados. “No quería que me vieran bajo una luz femenina por mi pecho”. McArthur se sometería a una mastectomía doble para extirpar ambos senos poco después de que se tomara la foto.

https://www.instagram.com/p/BD6QfgclGNh/?utm_source=ig_web_copy_link

En otro enfrentamiento inquietante, un hombre transgénero no identificado hizo gestos lascivos hacia Karen Davis, una YouTuber y defensora de las mujeres.

Separado por un oficial de policía, el hombre le lanzó a Davis insultos sexistas y obscenos antes de amenazar con divulgar en línea su información privada en un intento de intimidarla. El hombre hizo varios gestos perturbadores hacia Davis, a quien se escuchaba preguntar al policía por qué toleraba esas amenazas hacia ella.

El mismo hombre que se dice #trans cometiendo un acto lascivo en el video de Karen es cogido agrediendo a la valiente #TheDeprogrammer K.Yang #LetWomenSpeak

Un activista trans que estaba allí estimó que se habían juntado aproximadamente 200 contramanifestantes antes de que la policía apareciera en mayor número.

Tras la llegada del Grupo de Respuesta Estratégica del NYPD, la contraprotesta fue declarada una reunión ilegal y la policía comenzó a realizar arrestos.

La gira por Estados Unidos de la defensora británica de los derechos de las mujeres Kellie-Jay Keen se ha visto empañada por múltiples incidentes violentos en lo que se ha vuelto una tendencia preocupante, donde las mujeres críticas con la ideología de género están siendo atacadas por activistas trans.

La aparición de Keen en Portland, Oregón, tuvo que ser cancelada el 25 de octubre después de que se recibieran amenazas fundadas. A pesar de la ausencia de Keen, un pequeño grupo de mujeres llevó a cabo una manifestación no oficial en el lugar del evento como un acto de resistencia.

Mientras las mujeres hablaban, varios hombres enmascarados corrieron a donde estaban y les arrojaron tartas de crema.

El 26 de octubre, el evento en Tacoma, Washington, fue rápidamente desbaratado por transactivistas violentos y Antifa. Se denunciaron múltiples altercados físicos, y algunos transactivistas apareciendo con nudillos de bronce e intentaron tirar al suelo a las oradoras durante sus discursos.

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Prominent Trans Activist Found Guilty for 2016 Triple Homicide of California Family

By
Genevieve Gluck
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A prominent trans activist has been convicted in a 2016 triple homicide involving a lesbian couple and their son. Dana Rivers, 67, born David Chester Warfield, was found guilty of murder in the first degree for the killings of Charlotte Reed, Patricia Wright, and Benny Diambu-Wright.

Police were called on the night of November 11, 2016, in response to the sound of gunshots being fired outside the home of Wright and Reed in Oakland, California. When authorities arrived, they found Rivers covered in blood and gasoline and fleeing from the house, which had been set ablaze. When officers searched Rivers, they found a bloody screwdriver, a knife, brass knuckles, bullets, pepper spray and Benny Diambu-Wright’s iPod, according to court documents.

When discovered by police, Rivers had been heading towards his black Harley Davidson motorcycle, which was parked outside of the home with the keys left in the ignition. When police searched the Harley, they found blood on the bike, and a bloody knife in its saddlebag.

Rivers at the 2002 San Francisco Pride Parade. Photo source: danarivers.net

Examiners found that Charlotte Reed had been stabbed and bludgeoned dozens of times in addition to having gunshot wounds. Her partner, Patricia Wright, had been shot twice, and her son, Benny Diambu-Wright, who had just graduated from Berkeley High School, had been shot in the heart. The bodies of Wright, Reed, and Diambu-Wright were found inside the burning wreckage. Rivers was quickly taken into custody and booked at an Alameda County jail.

According to police reports, Rivers “began to make spontaneous statements about [his] involvement in the murders” while being arrested. Rivers ultimately confessed to killing the two women and their son, but entered a plea of not guilty on charges of triple homicide in 2017.

Patricia Wright [L], Benny Diambu-Wright [C], and Charlotte Reed [R].

The case had first been set for trial in 2019, but was repeatedly delayed in order to accommodate an investigation into Rivers’ mental health. The trial finally began on October 31.

Prosecutor Abigail Mulvihill of the Alameda County district attorney’s office wrote in a trial brief that Reed had first met Rivers at the Veterans Affairs Center in Menlo Park in 2016. The year before, Rivers had joined an “all-female” motorcycle gang called The Deviants, which had ties to Hell’s Angels, according to court testimony. Rivers was referred to as the “enforcer” of the gang, and he was using the pseudonym “Edge.”

In February 2016, Charlotte Reed started spending time with The Deviants, but she decided to leave after three months because it “became too political for her,” according to court records.

After she left the club, Reed began to experience threats. The trial brief presented by Mulvihill claims that “there was backlash from the club for her departure,” and a friend of Reed’s recalled seeing Rivers “just sitting and staring at Ms. Reed” on one occasion at the Menlo Park.

Mulvihill’s trial brief also states that Reed’s daughter told police that she had become afraid that Rivers “wanted to hurt her mother.”

Rivers’ multiple tattoos were mentioned on several occasions during the trial. Of particular note is a tattoo of a gun on his leg with a message reading, “Do not lie to me, fucker.” A depiction of empty rounds of ammunition are scattered beneath the weapon.

Former president of The Deviants motorcycle club, Sandra Carranza, confirmed during court testimony that Rivers held the position of “Sergeant in Arms,” and stated that the role required him to “keep order” if there was ever a dispute among members of the club.

Defense attorney Melissa Adams had requested that Rivers “be referred to only as Ms. Rivers, or Dana Rivers, or Dana” rather than “the defendant” in an effort to reduce bias against him.

“In addition, Ms. Rivers uses female pronouns such as she, her and hers. The court shall order all person [sic] involved in this case to use these pronouns as well,” wrote Adams in court documents.

Prior to the slayings, Rivers was a prominent trans activist known for fighting against “gender discrimination.”

Rivers became known in 1999 after he was fired from Center High School in Sacramento County, California, for openly discussing his “sexuality and the importance of gender self-determination” in class with students.

A 2010 Twitter Post by Dana Rivers.

Members of the Center Unified School Board who voted for Rivers’ dismissal argued that the decision had nothing to do with his gender identity, but rather due to concern for the rights of parents, some of whom had complained to the school administrators that Rivers had been discussing inappropriate and sexual aspects of his ‘transition’ with students.

According to a 1999 article in The New York Times, one parent stated that “[Rivers] said he had been sodomized as a youth and that he always felt he was a woman trapped in a man’s body and that he was going to be changing into a woman in the fall. He should have gotten permission from the parents to say this.”

Following the administration’s decision not to renew his employment, Rivers subsequently initiated a widely-publicized discrimination lawsuit that launched his career as a trans activist and resulted in a compensatory award of $150,000. He appeared on the Today Show and Good Morning America, and had even been profiled in the New York Times, quickly elevating his profile as a respected LGBT advocate.

Rivers was a keynote speaker for the National Center for Lesbian Rights as well as for The Tiffany Club, an organization founded to promote the political interests of those with “gender confusion.” 

Prior to the murders, Rivers also spoke as a guest lecturer at several universities, including Stanford and UC Davis, and served as a Board Member for the International Foundation for Gender Education (IFGE).

Dana Rivers appearing on TV in the early 2000s.

Feminist activist Kara Dansky was present as Rivers’ verdict was read, and expressed a cautious skepticism for what is coming next.

“The case is not ready to proceed to sentencing. Rivers has been found guilty, and, to the best of my understanding, the jury will be reconvened on December 5 to consider his insanity claim,” Dansky told Reduxx. She explained that Rivers’ sentencing is largely contingent on the consideration of his claim.

“If he prevails on the insanity claim, he won’t go to prison at all. Instead, he will go to a mental facility,” she said, continuing that if Rivers is sent to prison it is unclear “whether he will be placed in a women’s prison. We know that he has the right to make that application under state law.”

Under current California law, Rivers, if sent to a prison, would likely find his way into a women’s correctional institution, if not accommodated immediately due to his legal sex being “female.” California has one of the most liberal prisons self-identification policies in the country, something that has become a point of contention for women’s rights advocates.

S.B-132, also known as the Transgender Respect, Agency, and Dignity Act, was signed into effect in January of 2021 by California Governor Gavin Newsom. The law provides inmates housing based on their self-declared gender identity status.

Almost immediately after the legal guideline went into effect, California correctional centers were hit with hundreds of transfer requests from male inmates seeking movement into women’s facilities.

The California Department of Corrections and Rehabilitation has previously confirmed to Reduxx that prison transfer requests are based entirely off of a Gender Identity Questionnaire that could be issued during reception or requested by the inmate at any time during their incarceration. 

The CDCR Gender Identity Questionnaire. Source: CDCR Press Room

The Questionnaire is form with a short series of questions in which inmates can declare their pronouns, honorifics, and gender identity.

Male inmates do not need to identify as transgender to request transfer, and can simply identify gender non-conforming, or non-binary.

Earlier this year, Reduxx reported that a pedophile who had molested a 4-year-old girl had been moved to the California Institution for Women despite having been denied a gender and name change, and still legally being a male.

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NZ: Trans-Identified Male Sent to Women’s Prison After Stabbing Spree

By
Anna Slatz
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A trans-identified male in New Zealand has been handed a 9-year prison term for a stabbing spree at an Indian restaurant earlier this year which left three people, including his ex-girlfriend, severely injured.

Matthew Richard Nelson, a male who identifies as a woman named Pandora Electra, appeared for sentencing in the Hamilton District Court today. He had pleaded guilty to three charges of wounding with intent to cause grievous bodily harm, as well as charges of breach of a protection order, intentional damage, and resisting police.

Nelson, 31, had stood accused of stabbing three victims at the Sahara India Restaurant in Cambridge on May 4 of this year. One of the victims, a female, was Nelson’s former partner. A police summary of the incident presented to Court during a hearing earlier this year said Nelson had acted in a “quick and aggressive manner.”

According to police reports, Nelson had entered through the rear door of the restaurant and stabbed a male staff member in the shoulder as he worked in the kitchen. 

Sahara India Restaurant. PHOTO CREDIT: Restaurant Guru/Sahara India.

Nelson quickly targeted another worker, a female who was later revealed to be Nelson’s ex-girlfriend. He slashed her in the face and stabbed her in the upper back, causing her to suffer a punctured lung. Despite her horrific injuries, the woman managed to run out of the building and flee for help at a nearby gas station.

A customer who attempted to intervene in Nelson’s stabbing spree was similarly attacked, losing over a liter of blood after he sustained an injury to his abdomen.

Nelson then grabbed a chair, which he used to smash the restaurant’s front windows, and fled.

While being forensically swabbed in police custody by a doctor, Nelson is alleged to have remarked: “this is a bit excessive for only stabbing three people.”

Today, Nelson was sentenced to 9 years and three months in prison — and must serve at least 60% of the sentence before he can be considered for parole. According to Stuff.nz, the presiding judge respected Nelson’s identity as “Pandora Electra” — a new name he has introduced since previously identifying as “Emma.”

A motive had never been clearly determined for Nelson’s spree, and during the proceedings, the court sealed matters pertaining to Nelson’s situation which may have shed clarity on the reasons for the attack.

Nelson is currently being housed at Auckland Women’s Prison. A pre-sentence report submitted to the court had found Nelson to be a high risk of violent harm to others.

In December of 2021, the New Zealand Parliament unanimously passed a bill enabling total gender self-identification on legal documents. The Births, Deaths, Marriages, and Relationships Registration Bill dropped the requirements for any medical or court prerequisites prior to applying for a legal gender change.

Prison placement is largely based off of legal sex, with initial accommodations always matching the sex on the offender’s birth certificate. If an individual does not have a legal gender change but self-declares a transgender identity, they may still be eligible for transfer. The only known restriction is that offenders convicted of “serious” sexual crimes cannot be transferred to a prison housing inmates of the offender’s nominated sex.

The New Zealand DOC website advises prison officials to “consider the support the trans person needs and wants while in prison.” Corrections staff are required to discuss a support plan with trans-identifying inmates within three days of their reception. Men who claim a female identity may be provided with prosthetic breasts, brassieres, and feminine undergarments, and they may choose to request to be searched by female officers.

In April this year, a concerned citizen requested information regarding the number of trans-identifying prisoners currently being housed in women’s prisons. Dianne Landy filed a request asking for the figures, as well as the amount of individuals who have a medium to high risk security rating.

The DOC replied in an evasive manner, without providing the information and instead delayed their response indefinitely. 

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Asesino de niños transgénero puesto en libertad recientemente, amenaza a “TERFs” en las redes sociales

By
Genevieve Gluck
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Una cuenta de redes sociales que se hace pasar por mujer y acosa y amenaza a mujeres críticas con la ideología de género, parece pertenecer a un hombre transidentificado condenado por la brutal tortura y asesinato de una niña de 13 años.

El 24 de octubre, Reduxx informó que el Departamento de Prisiones y Supervisión Comunitaria de Nueva York había dado por terminada la libertad condicional de Synthia China Blast el 30 de julio, marcando así discretamente el final de su sentencia y las condiciones de su liberación.

Blast, nacido Luis Morales, fue sentenciado en 1996 por el horrible asesinato de Ebony Nicole Williams, de 13 años. Blast, junto con su novio Carlos Franco, fueron condenados a 25 años por el crimen, un crimen que tenía motivaciones sexistas y racistas.

Blast y Franco, miembros de la banda Almighty Latin King and Queen Nation, atacaron a la joven menos de 24 horas después de que se hubiera escapado de casa. Williams fue llevada a un apartamento en Hunts Point donde la tuvieron cautiva.

Según los investigadores del caso en aquel momento, Blast y Franco torturaron a la joven para luego apuñalarla repetidamente. Al darse cuenta de que todavía estaba viva después de haber sido apuñalada por Blast, Franco pisoteó el cuello de la niña hasta que se rompió. Antes de asesinarla, Blast la había agredido sexualmente.

Después de su muerte, Blast y Franco metieron el cuerpo desnudo de la niña en una caja, lo tiraron cerca de la autopista Sheridan, rociaron la caja con gasolina y le prendieron fuego. Un pasajero en un tren cercano vio las llamas y llamó al 911. Blast y Franco fueron detenidos poco después de que la policía recuperase el cuerpo.

Ebony Nicole Williams y su hermano en una foto sin fecha. Crédito: NEW YORK TIMES ARCHIVES

Durante el juicio, el fiscal del Bronx, William Hrabsky, dijo sobre el crimen: “El sufrimiento por el que pasó esta pobre niña es increíble y pone este crimen en la categoría de monstruoso y bárbaro”.

A pesar de declararse inocente ante el tribunal y ante los medios de comunicación en entrevistas posteriores, Blast se había “jactado” con amigos de haber cometido el crimen, algunos de los cuales más tarde testificarían en su contra por ello.

Si bien nunca se buscó una condena por violación, ya que el cuerpo de la niña había sido mutilado demasiado severamente para que las autoridades pudieran conseguir una muestra de ADN, Blast y Franco recibieron una condena de 25 años a cadena perpetua por el asesinato de Williams.

Una semana después de la publicación del artículo de Reduxx que informaba sobre el final de la libertad condicional de Blast, Reduxx recibió un correo electrónico de una cuenta enfurecida porque el artículo había mencionado las acusaciones de que Blast había violado a Williams. El correo electrónico fue enviado desde una dirección que comenzaba con el número ‘4300’.

Una captura de pantalla del correo electrónico recibido por el personal de Reduxx el 7 de noviembre: Leí vuestra historia sobre Synthia Blast. Es incorrecta. Synthia nunca fue arrestade ni condenade por violar a una niña, ni fue sentenciade por ello. Synthia no es un delincuente sexual registrado en el estado de Nueva York donde fue arrestade ni está en prisión, lo que significa que puede demandaros por la información falsa que estáis dando. Solo un aviso, tiene abogados que le están apoyando y fue liberade de prisión después de que el coacusado Carlos Franco le escribiera al fiscal del distrito y confesara que él solo mató a la Srta. Williams y que Synthia no estuvo involucrade en el homicidio. La condena de Synthia fue anulada. Solo un aviso. Vuestro artículo puede algún día convertirse en vuestra pesadilla legal y financiera.

El mismo día, apareció una cuenta de Twitter con el nombre @Code4300, haciéndose pasar por la editora en jefe de Reduxx, Anna Slatz, usando su foto y la marca Reduxx.

Mientras publicaba comentarios muy perturbadores y sexualizados sobre Slatz, la cuenta comenzó a seguir a defensoras de los derechos de las mujeres en Twitter en un claro intento de llamar su atención.

“Esta cuenta: @Code4300 se está haciendo pasar por Anna Slatz pero es claramente un TRA (transactivista).”

Mientras se hacía pasar por Slatz, la cuenta @Code4300 afirmaba estar en una relación con un hombre transidentificado y pedía un boicot a Reduxx y su prohibición. El propietario de la cuenta también hacía varias referencias a Blast y reafirmaba su inocencia, utilizando tanto su seudónimo femenino como su nombre de nacimiento, Luis Morales.

La cuenta también amenazaba a Slatz, y decía tener la dirección de su casa. Unas 24 horas más tarde, comenzó a hacerse pasar por otras colaboradoras y simpatizantes de Reduxx, usando sus nombres y fotos de perfil para publicar contenido perturbador.

Poco después, se pudo vincular @Code4300 a una cuenta de Instagram que utilizaba de manera similar el apodo ‘4300’, que rápidamente se descubrió que pertenecía a Synthia China Blast.

Tanto el correo electrónico como las cuentas de Twitter e Instagram de Blast tenían el número ‘4300’.

Blast comentó en Instagram haber estado en un refugio para mujeres en 2020, lo que habría sido poco después de ser puesto en libertad condicional. Por la misma época, puso un anuncio de alquiler de una cama libre en su apartamento, pidiendo que solo llamaran “hombres que les gustaran las mujeres trans o mujeres que les gustaran las mujeres trans”.

Usando el apodo @Code4300 en Twitter, Blast había participado en repetidos llamamientos a la violencia contra mujeres, y en particular contra mujeres que no comulgan con la idea de que los hombres puedan convertirse en mujeres.

“Las TERF no solo son anti-trans, también son anti-hombres. Debemos erradicarlas antes de que sus enfermedades se propaguen a nuestros niños”, decía en la bio de la cuenta, que ahora ha sido cambiada, junto con el nombre de usuario y la foto de perfil.

Desde de ser expuesto como administrador de esa cuenta en Twitter, Blast ha seguido reafirmando su inocencia de los delitos por los que fue condenado, lo que sigue la tendencia de sus afirmaciones anteriores a los medios de comunicación de que fue acusado injustamente.

Además de hacer un llamamiento a la violencia contra las mujeres, hizo declaraciones que sugieren que los hombres que se identifican como trans son superiores a las mujeres.

Antes de empezar con el acoso dirigido al personal de Reduxx y a las mujeres asociadas con esta publicación, @Code4300 afirmó estar a favor de la “abolición de las prisiones” y celebró tanto el tiroteo de un policía como el apuñalamiento de un oficial de prisiones en Rikers Island.

En los días siguientes, se creó una segunda cuenta de Twitter que decía ser Blast con el nombre de HuntingTERFs (Cazando terfas).

“Para que conste, mi nombre es Synthia China Blast y fui condenado injustamente por asesinato”, dice una publicación del 10 de noviembre.

“Para que conste, mi nombre es Synthia China Blast y fui condenado injustamente por asesinato. Me llevó 25 años probar mi inocencia. Soy una hembra trans. Soy inocente. Y estoy siendo constantemente atacado por terfas. Vivo en San Juan, Puerto Rico y estoy escribiendo un libro sobre mi vida.”

La segunda cuenta también se jactaba de que otra condena llevaría a Blast a una prisión de mujeres. “Si alguna vez me arrestan de nuevo, ahora me voy con las mujeres. No más prisión de hombres para mí”, escribió @KillingTime1235.

La cuenta parece dedicada principalmente a publicar capturas de pantalla de crímenes cometidos por mujeres, con la intención de demostrar que “las mujeres cis son extremadamente violentas y peligrosas”.

WE NEED TO TAKE SERIOUS THE FACT THAT CIS WOMEN CAN BE EXTREMELY VIOLENT AND DANGEROUS. THAT’S WHY IN PUERTO RICO WE DON’T TRUST ANYONE WHO DOESN’T LIVE IN OUR BARRIO. LIVING IN PR PROTECTS ME FROM THE FALSE INFORMATION PEOPLE PUT OUT ON ME. IF YOU WANT ME COME TO MY ISLAND. —

HuntingTERFs (@KillingTime1235) November 10, 2022

“Tenemos que tomarnos en serio el hecho de que las mujeres cis pueden ser extremadamente violentas y peligrosas. Por eso en Puerto Rico no nos fiamos de nadie que no viva en nuestro barrio. Vivir en Puerto Rico me protege de la información falsa que la gente publica sobre mí. Si quieres algo de mí, ven a mi isla.”

En 2014, el conocido actor transgénero Laverne Cox apareció en un video promocional ahora eliminado producido por una organización transactivista de cabildeo de reforma penitenciaria, el Sylvia Rivera Law Project (SRLP).

En el video, Cox declaraba su apoyo al SRLP y al Comité Asesor de Prisioneros (PAC) de la organización. Luego leía una carta de Blast que apelaba a la compasión de los espectadores y describía la situación en la que vivía en la cárcel como una “negación de los derechos humanos básicos”.

Cox más tarde se distanció de Blast después de conocer más detalles sobre los crímenes por los que había sido condenado.

En 2019, un año después de que Blast fuera puesto en libertad condicional por primera vez, apareció en un video publicado en la página oficial de Facebook del SRLP, y fue descrito como miembro del Comité de Acción Política y voluntario.

Una captura de pantalla tomada de una entrevista de SRLP de 2019 con Blast.

“Vine de estar encarcelado en una celda a aprender sobre SRLP y su misión, quién era Sylvia Rivera, como persona, quién era realmente, y … sobre Marsha P. Johnson, y definitivamente me enganché a este movimiento”, dijo Blast.

“Todos tenemos una voz. Y vivimos en una época, hoy, donde esa voz finalmente se está escuchando. Todavía no hemos alcanzado ese punto. Todos estamos gritando juntos, y ahora finalmente nos están escuchando”, dice Blast, que por aquel entonces promocionaba el SRLP como un centro que podía ayudar a las personas transgénero a cambiar sus nombres e identidad legal.

“Cada vez que encuentro a una persona transgénero, le pregunto: ¿Conoces el Proyecto de Ley Sylvia Rivera?”

Reduxx había previamente escrito sobre otro prisionero transidentificado que fue seleccionado específicamente por el SRLP para participar en el transactivismo y la campaña de reforma penitenciaria. Xena Grandichelli, nacido Jeffrey Willsea, es un delincuente sexual infantil convicto que ha realizado servicios comunitarios para el SRLP. En 1994, Grandichelli se declaró culpable de 11 cargos de abuso sexual a una niña de 3 años.

Grandichelli se asoció con el Sylvia Rivera Law Project (SRLP) y se le nombró miembro del Movement Building Team. En una carta de 2015 publicada en el sitio web de SRLP, Grandichelli describía cómo los miembros del equipo de la organización trabajaron activamente para reclutarlo mientras aún estaba encarcelado por abusar sexualmente de una niña.

A pesar de proporcionar apoyo para pederastas convictos, el Sylvia Rivera Law Project recibe el apoyo financiero de varias instituciones y figuras notables, incluida la Stonewall Community Foundation y el millonario médico y farmacéutico transidentificado Martine Rothblatt.

Blast no es el único asesino transidentificado que ha estado utilizando las redes sociales para amenazar a las mujeres críticas con la ideología de género.

En 2021, se descubrió que el asesino sueco Magdala Johansson había estado acosando a cuentas de Twitter que habían publicado detalles sobre su espeluznante crimen.

Johansson, nacido Kristoffer, fue condenado en 2013 por el brutal asesinato de su ex novia, Vatchareeya Bangsuan, de 20 años. Johansson apuñaló a Bangsuan hasta la muerte para luego desmembrarla y esparcir partes de su cuerpo en un bosque cercano. Algunas fuentes también han informado que Johansson se masturbó sobre el cadáver mutilado de Bangsuan, y esparció su semen sobre su cuerpo.

Johansson fue finalmente sentenciado a 14 años, pero apeló y se le rebajó la sentencia a 10. Sirvió solo 6 años antes de ser liberado en 2020.

Al igual que Blast, Johansson se llamaba a sí mismo en Twitter e Instagram “TERF Hunter” (“Cazador de terfas”) y escribió publicaciones misóginas sobre mujeres críticas con la ideología de género, a veces al tiempo que enseñaba su colección de armas.

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NYC: Violent Trans Activists Arrested During Pro-Woman Demonstration

By
Genevieve Gluck
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What was intended to be a peaceful demonstration held by women critical of gender ideology turned violent on Monday after trans activists showed up to oppose the women’s right to freedom of speech.

At least nine people were arrested in Manhattan during protests that broke out in opposition to the Let Women Speak event. The event is the last stop in the US tour organized by grassroots women’s rights campaigners and featuring prominent British women’s advocate Kellie-Jay Keen, founder of Standing for Women.

Before the event was even able to formally kick off, Keen announced through YouTube that she was unable to attend because she could not get to the speaking podium safely. Keen explained that police were unwilling to provide her an escort to the area where other demonstrators had gathered outside of City Hall so she could pass through the crowd of detractors safely.

Dozens of Antifa members and trans activists had gathered around the female speakers, forcing authorities to set up barricades to separate the two groups. According to Keen, an officer had initially offered to assist her but then decided against it, saying he would not “risk” placing other officers in danger by facilitating the event further.

As other female speakers attempted to carry on, giving passionate speeches on the impact of gender ideology on child safeguarding and women’s rights, the congregation of pro-trans demonstrators became increasingly agitated. In one video clip circulating on social media, trans activists can be seen surging against the barricades as police officers push back, barely able to contain the hostile crowd.

In other clips from the event, trans activists can be seen clashing with security guards and law enforcement while attempting to breach the barricades. According to the New York Post, police began arresting the counter-protesters, and 9 people in total were taken into custody. More detailed information, including whether charges have been filed, has not yet been released.

During one of the most viral incidents to come out of the event, two transgender social media influencers and models were seen hurling threats at Jeanna Hoch, a Colorado woman who has previously been targeted by members of Antifa.

Trans-identified male Amara Gisele Jones Velasquez, formerly known as Anthony Martucci, attempted to threaten and insult Hoch repeatedly, stating: “I’m going to beat your ass, bitch! These hands do not discriminate!”

Velasquez is a model in New York, and has worked campaigns for Pride NYC and Coach.

“These titties are more real than you will ever be, bitch. No man wants you!” He added, before grabbing at his exposed chest in a lewd gesture. Later, as the women’s rights campaigners were leaving the event while escorted by police and security, Velasquez angrily approached Hoch and was filmed attempting to spit on her several times.

As one participant in the event noted, women had devised a strategy of leaving the area in groups of four or five to avoid being assaulted by trans activists on dispersal.

Trans-identifying female model Casil McArthur, who stood next to Velasquez as he threatened Hoch, chanted “Nazi scum,” at the women. McArthur began modelling at the age of ten, using the name Dani Rose, but began injecting testosterone in order to medically transition at the age of 17.

In a 2016 Instagram post, McArthur reveals that she felt insecure about her body, and her breasts in particular. “I was super hesitant with a photo like this,” McArthur captioned a photo of herself standing topless, with her arms crossed. “I didn’t want to be seen in feminine lighting because of my chest.” McArthur would undergo a double mastectomy to remove both of her breasts shortly after the photo was taken.

In another disturbing encounter, an unidentified transgender male made lewd gestures towards Karen Davis, a pro-woman YouTuber and advocate.

Separated by a police officer, the man called Davis sexist and obscene slurs before threatening to release her private information online in an attempt to intimidate her. The man made several disturbing gestures towards Davis, who was heard asking police why they were tolerating his threats towards her.

One trans activist who was on the scene estimated that there were approximately 200 counter-protesters before police appeared in greater numbers.

Following the arrival of the NYPD’s Strategic Response Group, the counter protest was declared an unlawful assembly and law enforcement began to make arrests.

The US tour of British women’s rights advocate Kellie-Jay Keen has been marred by multiple incidents of violence in what has been a worrying trend where women critical of gender ideology are being targeted by trans activists.

Keen’s appearance in Portland, Oregon had to be cancelled on October 25 after credible threats were received. Despite Keen’s absence, a small group of women carried out an unofficial demonstration in the event’s place as an act of resistance.

As the women spoke, multiple masked men rushed their area and pelted them with whipped cream pies.

On October 26, the event in Tacoma, Washington was quickly derailed by violent trans activists and Antifa. Multiple physical altercations were recorded, with some trans activists showing up wearing brass knuckles and attempting to grapple female speakers to the ground during their speeches.

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UK: Ex-Trans Convicted Rapist Spied on Latest Victim Using Amazon Alexa

By
Reduxx Team
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Aaron Herschell, pictured in 2017. Photo Credit: The Daily Record

A sex offender has become the first person in the UK to be convicted of using an Amazon device to “spy” on an unsuspecting victim. Aaron Herschell, 25, had previously identified as a woman while standing trial on sexual assault charges.

Herschell began referring to himself as a ‘female’ in 2016 after being charged for the rape of two teen girls he met on a dating app. During his remand at the Polmont Young Offenders’ Institution, Herschell made headlines for being the first male inmate in Scotland to request “gender affirming” surgery while awaiting trial for sex offenses.

According to the Daily Record report at the time, Herschell was also the first male rapist in Scotland to be remanded as a man, but face the charges as a woman after changing his name to “Alexis.”

While incarcerated at Polmont, Herschell demanded female correctional officers do his rub-downs and strip searches, an order the staff were told to comply with despite their concerns for their safety.

Herschell was ultimately convicted in 2017 for raping one of the young women, but was cleared on the second count despite having confessed to raping both girls during a recorded confrontation with the victims’ friends before the trial. He was sentenced to two years in prison, but was released in October of 2018. He violated his release conditions shortly after his release, and was briefly taken into custody.

In May of 2020, a Risk of Sexual Harm Order (RSHO) was imposed on Herschell, but he violated his conditions again just months later by deleting the dating app Kik in an attempt to scrub his internet history — something strictly prohibited under the terms of his RSHO.

The app, notorious for its use with child predators, allows users to ‘Match and Chat’ and ‘Flirt’ with girls and boys from chosen age groups. Police discovered Herschell had also attempted to erase chat records from his phone and computer.

The next year, in 2021, Herschell was found to have been living in a house with children present. This constituted the third breach of his RHSO, and he was subsequently sentenced to a prison term of 14 months with a 10-year sex offender registration.

Herschel’s prison term was backdated several months due to having been remanded in custody in July of 2021, and he was already out of prison by spring of this year.

Last week, at Livingston Sheriff Court, Herschell admitted to using an Amazon Echo device to spy on a female former acquaintance. According to the Daily Mail, the court heard that in May of this year, Herschell had connected his device to hers without her knowledge or consent in order to allow him to hear what she was doing in her home. Herschell was convicted of Acting in a Threatening or Abusive Manner, and is set to be sentenced later on this month.

Despite having identified as a woman following his 2016 rape charge, Herschell has reportedly stopped his transition plans and has returned to calling himself Aaron. During his hearing last week for the spying incident, the Judge noted that Herschell had also adopted a fake identity in breach of his previous RHSO.

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ARGENTINA: Proxeneta trans acusado de trata de personas, incluidos menores de edad.

By
Nuria Muíña García
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Un conocido “trabajador sexual” transidentificado de Argentina se enfrenta a cargos de victimizar sexualmente a 30 personas, algunas de las cuales eran menores de edad. Daniel Ariel Araya Segura, mejor conocido como Paloma León, también está acusado de intento de asesinato.

La investigación de León se inició en diciembre de 2020 después de una llamada a la línea 145 del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata de Argentina que avisaba que había forzado a varias personas, incluidos jóvenes, a la esclavitud sexual.

La fuente anónima dijo a las autoridades que León explotaba sexualmente a aproximadamente treinta víctimas en una casa en Mendoza, Argentina, entre las que estaban hombres transidentificados, mujeres y menores de edad.

Las víctimas se mantenían bajo estricta vigilancia y eran obligadas a ofrecer servicios sexuales las 24 horas del día. Estaban amenazadas continuamente, e incluso les habían retenido los cheques de asistencia social del gobierno.

La policía puso el domicilio bajo vigilancia e intervino los teléfonos de León y sus allegados, entre los que se encontraba otro hombre transidentificado que se hacía llamar Antonella Rubí Iparraguirre Briceño, de 31 años. Ricardo Néstor Cáceres Molina, pareja de este último, también fue puesto bajo vigilancia.

Gracias a las escuchas telefónicas iniciales, se descubrió que León y sus cómplices habían obligado al menos a 10 personas a prostituirse.

Paloma León con la policía. Crédito de la foto: El Sol.

En febrero de 2021, la policía recibió una nueva denuncia de otra fuente anónima, que advirtió que León explotaba sexualmente a otros individuos transidentificados en una calle de Mendoza. Las víctimas recibían una paliza si no “trabajaban” a satisfacción de León, o si intentaban irse.

Unos días más tarde, una tercera llamada anónima informó a la policía que León prostituía a mujeres en un hotel de su propiedad en otra parte de la ciudad.

Tras la última denuncia, las autoridades determinaron que tenían pruebas suficientes para arrestar a León, y fue detenido junto con Rubí Iparraguirre y Cáceres Molina.

En el registro de sus propiedades se encontraron cajas de preservativos, dinero en efectivo, medicamentos, cocaína y teléfonos móviles, mientras que en la finca de sus padres se incautó un ordenador, un teléfono móvil y dos armas de fuego que estaban listas para disparar.

Apenas un mes después de su detención, una víctima que había sido liberada del burdel de León y que había cooperado con la policía, recibió un disparo en el cuello por orden de León. La mujer sobrevivió y contó a la policía que horas antes del ataque había recibido amenazas telefónicas de León desde la cárcel.

“Tenés los días contados, HDP (hija de puta). Te voy a buscar hasta por debajo de las piedras”, le había dicho León a la víctima. Pero León culparía a Iparraguirre por el ataque.

Después del tiroteo, León, Iparraguirre y Cáceres Molina fueron acusados de intento de homicidio premeditado, además de los cargos de trata de personas que ya tenía. Carretero Suárez, el presunto tirador, también fue localizado y detenido por intento de asesinato.

León es un viejo conocido de la policía. Ya había cumplido 18 años de prisión por homicidio, de donde salió en 2006.

En 2015, fue acusado una vez más después de que dos hombres transidentificados que ejercían la prostitución acusaran a León de haber organizado un brutal asalto contra ellos por “trabajar” en un área controlada por él sin su permiso. León había exigido una tarifa de 2.000 pesos (aproximadamente $ 13 USD) por mes para ejercer en su zona, que las víctimas no habían podido pagar. Finalmente fue absuelto por falta de pruebas.

León fue el protagonista de una película documental de Carina Sama estrenada en 2013 y titulada Madam Baterflai.

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ARGENTINA: Trans Pimp Facing Charges of Human Trafficking Including Minors

By
Nuria Muíña García
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A well-known trans-identified “sex worker” in Argentina is facing charges of sexually victimizing 30 people, some of whom were minors. Daniel Ariel Araya Segura, better known as Paloma León, is also facing one count of attempted murder.

The investigation into León began in December of 2020 after the Argentinian National Program for the Rescue of Persons Victimized by Trafficking received a tip that he had forced a number of people, including youth, into sexual slavery.

The anonymous source told authorities that León was sexually exploiting approximately thirty victims in a house in Mendoza, Argentina. The victims included trans-identified males, as well as women and minors.

Victims were kept under strict monitoring and were forced to be available to sell sexual services 24 hours a day. They were routinely threatened, beaten, and even had their government social assistance checks stolen by León.

The police placed the home under surveillance and tapped the phones of León and his associates, including another trans-identified male who goes by the name of Antonella Rubí Iparraguirre Briceño. One of the men’s partners, Ricardo Néstor Cáceres Molina, was also surveilled.

From the initial wiretaps, it was discovered that León and his accomplices had forced at least 10 individuals into prostitution.

Paloma León with police. Photo Credit: El Sol.

In February of 2021, police received additional information from another anonymous source who warned that León was sex trafficking more trans-identified individuals on a street in Mendoza. The victims would be beaten if they did not “work” to León’s satisfaction, or tried to stop.

Shortly after, a third anonymous caller advised police that León was trafficking female victims out of a hotel he owned in another part of town.

Following the third tip, authorities determined they had enough evidence to arrest León, and he was taken into custody, along with Iparraguirre Briceño and Cáceres Molina.

Boxes of condoms, cash, cocaine and mobile phones were found at León’s properties, while a computer, a mobile phone and two loaded firearms were seized on his parents’ farm.

Just one month after he was taken into custody, a victim who had been freed from León’s brothel and had cooperated with police was shot in the neck, reportedly on León’s orders. While the woman survived, she told police that hours before she was attacked, she had received a threatening call from León, who was in prison.

“Your days are numbered, you bitch. I’m going to leave no stone unturned while looking for you [sic],” León had reportedly told the victim. But León would go on to blame Iparraguirre for the attack.

Following the shooting, León, as well as Iparraguirre Briceño and Cáceres Molina, were charged with attempted premeditated homicide in addition to the human trafficking charges they were already facing. Carretero Suárez, the alleged shooter, was also located and detained on charges of attempted murder.

León is well-known to police. He had previously served 18 years in prison for homicide, and was only released in 2006.

In 2015, he was charged once again after two trans-identified male prostitutes accused León of having organized a brutal assault on them after they practiced in an area controlled by him without his permission. León had demanded a fee of 2,000 pesos (approximately $13 USD) per month in order to work in his zone, which the victims had been unable to pay. He was ultimately acquitted due to lack of evidence.

León was the protagonist of a documentary film by Argentinian artist Carina Sama released in 2013 titled Madam Baterflai.

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Influencer Nikita Dragun Was Never Held in Men’s Unit, Miami-Dade Corrections Claims

By
Shay Woulahan
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Officials from the Miami-Dade County department of Corrections and Rehabilitation are refuting viral claims that a popular trans-identified YouTuber was held in a “men’s unit.”

Nikita Dragun, born Nguyen, was arrested on November 7 after causing a scene at The Goodtime Hotel in Miami Beach. Police officers were allegedly called to the hotel just after 6 p.m.

When they arrived, hotel security told police officers that Dragun had been “causing a disturbance and being extremely disorderly,” including “walking around the pool area unclothed.” When hotel staff confronted him about his behavior, Dragun reportedly threw a glass of water at a hotel staffer. 

When police officers arrived at Dragun’s hotel room, he first attempted to barricade himself inside the room. He opened the door only to throw water on police before slamming the door once again. He was arrested after the incident and taken to Turner Guilford Knight Correctional Center.

The following day, Dragun appeared in bond court via video link. Dragun faces a felony charge of battery on a law enforcement officer, a misdemeanor disorderly conduct charge, and a municipal ordinance violation of battery.

During the hearing, Dragun asked Judge Mindy Glazer whether he had to remain in a “men’s unit” in the jail.

“I don’t make the rules up there,” Glazer replied. Video of the exchange was posted on social media and quickly went viral as people expressed concerns for Dragun’s safety, and anger that his sex was recorded as male on the booking.

Dragun’s bond was set at $2,000 and he has since been released. His publicist, Jack Ketsoyan, released a statement following his release.

“The situation with Nikita, who is legally female, being placed in a men’s unit of a Florida jail is extremely disturbing and dangerous,” Ketsoyan wrote.

“This decision made by the Miami-Dade County Corrections Department directly violates their protocol, which mandates that transgender inmates are classified and housed based on safety needs and gender identity. Nikita has been released and is now safe. Thank you for respecting her privacy during this time.”

However, Miami-Dade County Corrections has come out and refuted the viral claims, asserting that Dragun “never made it beyond the booking process” prior to release.

“She was never placed in a men’s unit,” Miami-Dade Corrections spokesperson Juan Diasgranados said in a statement, using feminine pronouns to refer to Dragun. “All inmates undergoing our intake process remain in an open seating (open booking) area, in the presence of correctional staff.”

The LEO Lobby as seen in a 2020 YouTube video providing a perspective on the intake process.

The open booking area Diasgranados is referring to is likely the Law Enforcement Officer (LEO) Lobby, where most inmate triage occurs at the Turner-Guilford Knight Correctional Center. The Lobby is an open area where numerous correctional staff are present and working in different capacities through processing inmates. The arresting officers typically remain with the inmates until they are booked.

In his statement, Diasgranados also said that Dragun was placed in a holding cell by himself due to his “high-profile status” before being released, and that he was escorted by an “LGBTQ officer” throughout his time there.

“Miami-Dade Corrections and Rehabilitation Department (MDCR) is committed to protecting the rights of the transgender community and of all LGBTQ people,” the statement continued.

“MDCR has procedures in place for the appropriate intake, housing, and medical needs of transgender inmates, and we are committed to ensuring that all inmates in our custody, including transgender persons, are treated appropriately throughout our intake, classification and placement process.”

Despite activist claims to the contrary, the Turner-Guilford Knight Correctional Center is a prison which houses both male and female inmates moving through various stages of the custody process. Local crime news out of Miami-Dade county shows there are female inmates currently incarcerated at the facility.

The news of Dragun’s custody went viral on social media this week after a number of accounts sympathetically repeated the claims Dragun had been incarcerated in a “men’s unit,” labeling it a “violation” of human rights.

“Nikita Dragun is one of the most well known trans women in the world; if this can happen to her, it can happen to any of us. Trans women are women and belong in women’s spaces. This is absolutely horrific and should be considered cruel and unusual punishment,” trans-identified male YouTuber Samantha Lux wrote.

One tweet condemning Dragun’s placement wracked up over 130,000 ‘likes’ on Twitter in just 48 hours.

While the statement from Miami-Dade County clarified that Dragun was not held in a “men’s unit,” prior to the release of that information, many women’s rights advocates on Twitter noted that Dragun is a biological male, and so his placement in a men’s unit would not have been out-of-line in the event it had occurred.

A vicious debate broke out between trans activists and feminist on social media over the issue, with some transgender Twitter users declaring that “if you support trans women jailed with other men you support rape, full stop.”

While many correctional departments do not collect or release information on inmate gender identity, those which do consistently show that trans-identified male inmates are significantly more likely to be incarcerated for sexual offenses than their non-transgender counterparts.

According to Keep Prisons Single Sex, an advocacy group for incarcerated women, almost 50% of male federal inmates who identify as transgender are in custody for sex offenses. This is compared to just 11% of the non-trans male inmate population.

In California, just over one-third of male inmates seeking transfer to women’s prisons on the basis of transgender identity are registered sex offenders.

Over the past year, there has been a notable wave of disturbing cases related to trans-identified male inmates with histories of extreme violence towards women and children being transferred to women’s correctional facilities across the United States.

In April, Reduxx reported that a male inmate serving a 50-year sentence for the brutal murder of an immigrant woman had been moved to New Jersey’s only women’s correctional facility, Edna Mahan, after declaring a transgender identity.

Perry Cerf, 39, was arrested for the rape and murder of 47-year-old Ecuadorian immigrant Flor Andrade in 2002. Cerf, who now goes by the name Michelle Hel-loki Angelina, boasted about beating Andrade to death, kicking her until her “head was on backwards.” He also stated he had drank the woman’s blood.

Cerf is not an isolated case in New Jersey. There are multiple violent trans-identified male inmates currently housed at Edna Mahan. Female inmates in the facility, especially those with a history of being victims of sexual abuse, have come forward to express fear and anxiety over being incarcerated with males.

In Washington, there are at least two trans-identified males who committed acts of femicide serving their sentences in the state’s female correctional facility.

Donna Perry, a serial killer who murdered three prostituted women prior to identifying as transgender was recently transferred to the Washington Women’s Correctional Center, while Nonnie Lotusflower is serving a 10-year sentence at the same institution for the brutal rape and murder of a 17-year-old girl.

Despite trans activist claims to the contrary, the presence of trans-identified males in women’s correctional facilities has resulted in multiple cases of sexual violence against incarcerated women across the United States.

In April, a trans-identified male inmate on Rikers Island was convicted of raping a female prisoner while in the women’s section of the New York prison. One month later, a source at the Central California Women’s Facility exclusively reported to Reduxx that a transgender transfer had allegedly sexually assaulted an intoxicated female inmate before threatening other women with rape.

Four female inmates in California are in the process of suing the state’s correctional body over abuses they suffered at the hands of trans-identified male transfers. One plaintiff in the suit, Krystal Gonzales, reported she had been sexually assaulted by a trans-identified male who had been placed in her cell.

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Reino Unido: se le permite a un pederasta transgénero el acceso a un refugio para mujeres y niños víctimas de violencia doméstica

By
Genevieve Gluck
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Un pederasta transidentificado de Escocia usó un alias para conseguir plaza en un refugio para víctimas de violencia doméstica que acoge a mujeres y niños vulnerables, donde se le permitió permanecer durante 71 días antes de que lo expulsaran. Katie Dolatowski, de 22 años, es un delincuente sexual registrado por delitos que involucran a niñas, pero se le permitió residir en el Refugio de Ayuda a Mujeres de Leeds.

Dolatowski proporcionó documentación oficial que respaldaba su nueva identidad, que utilizó para engañar al personal del refugio para mujeres. Dolatowski se alojó en una sección del refugio que alberga a personas que se identifican como transgénero, pero tenía acceso a algunos recursos y espacios compartidos con el área principal de mujeres.

Dolatowski tiene un historial perturbador de ataques sexuales contra niñas en instalaciones públicas. En 2018, fue descubierto filmando en secreto a una niña de 12 años en un baño de mujeres en un supermercado Asda en Fife, Escocia.

La niña estaba usando un cubículo en los baños y en un estado de desnudez parcial cuando vio a Dolatowski que la estaba grabando sosteniendo el teléfono por encima de la pared divisoria. La niña gritó pidiendo ayuda y salió corriendo. Las imágenes de CCTV del supermercado se utilizaron para identificar a Dolatowski, y tras una investigación adicional, se encontraron 12 segundos de película de la niña en su teléfono móvil y iPad.

Al mes siguiente, Dolatowski agredió sexualmente a otra niña en el baño de un supermercado Morrisons en Kirkcaldy, Fife. Agarró a la niña de 10 años por la cara y la empujó a un cubículo, ordenándole que se quitara los pantalones. Durante el asalto, Dolatowski también amenazó con asesinar a la madre de la niña en un intento de asustarla para que hiciera lo que él decía. Sin embargo, la joven se defendió golpeándolo y pudo zafarse y correr hacia sus padres.

A pesar de las dos agresiones a niñas, Dolatowski recibió una sentencia de tres años de trabajos comunitarios en lugar de una sentencia de prisión. También se le prohibió tener contacto con niños, se le puso en el registro de delincuentes sexuales y se le ordenó completar el servicio comunitario.

Al enterarse de la inquietante historia de Dolatowski, la gerencia de Leeds Women’s Aid lo sacó de las instalaciones. La presidenta ejecutiva, Nik Peasgood, dijo a The Sun: “Estamos horrorizadas de que alguien con tales crímenes pueda venir a un refugio de mujeres usando una identidad diferente. Somos conscientes de que un delincuente que utiliza una identificación autenticada puede acceder a los servicios de alojamiento y no somos las únicas en ser manipuladas de esta manera”.

Farah Nazeer, también directora ejecutiva del refugio, agregó: “Esta situación es una prioridad para nosotras, además del apoyo a nuestra federación de servicios locales de abuso doméstico”.

Una madre de tres hijos y residente del refugio le dijo a The Sun que la situación la asustó y la hizo temer por la seguridad de sus hijos. “Es horrible. Como víctima de abuso sexual, todo es un desencadenante. Vine aquí con mis hijos porque pensé que era un lugar seguro y descubrir que había un pedófilo viviendo a pocas puertas de distancia durante meses es simplemente horrendo”.

Como informó anteriormente Reduxx, Dolatowski, que mide casi 6’5 (1.96 m), fue expulsado de una vivienda social la noche del 19 de octubre cuando los enfurecidos vecinos se dieron cuenta de sus crímenes pasados. Se juntó una multitud a las puertas de su casa exigiendo su expulsión. Una grabación telefónica tomada por un transeúnte muestra a un gran número de policías en el lugar, que sacaron a Dolatowski y a otras personas no identificadas de la casa.

Vecinos furiosos expulsaron anoche a un pedófilo trans que se descubrió que vivía entre niños en una urbanización de viviendas sociales. Katie Dolatowski fue condenado por haber intentado violar a una niña en el baño de mujeres de una supermercado.

Esta no es la primera vez que Dolatowski tiene acceso a un refugio para mujeres.

En febrero de 2019, The Courier reveló que Dolatowski, que no tenía un hogar en aquel momento, había sido alojado en un albergue para mujeres delincuentes sobre la base de su identidad de género autodeclarada. Se le dio autorización a pesar del hecho de que Dolatowski no tenía un Certificado de Reconocimiento de Género (GRC), un documento legal que establece un cambio en el nombre y el sexo de nacimiento en su identificación.

Una mujer que residía en la unidad para delincuentes sin hogar dijo a The Courier: “Este es un albergue para mujeres y las que trabajan aquí son todas mujeres. Me pone enferma y no puedo dejar de pensar en lo que ha hecho”.

Se tomó una decisión editorial en el artículo del periódico para alterar la redacción y se usó el pronombre femenino “ella” en lugar de “él”.

Por aquel entonces, una portavoz de Women and Girls in Scotland señaló que alojar a hombres en ciertos espacios solo para mujeres, como prisiones y refugios de crisis, puede ser un desencadenante para las mujeres vulnerables que residen allí.

“Es muy probable que las mujeres delincuentes hayan experimentado violencia y/o abuso machista, y muchas sufren de afecciones como el TEPT. Como tal, la presencia de hombres en espacios donde son vulnerables podría ser comprensiblemente muy estresante para estas mujeres, y para muchas la presencia de un delincuente sexual masculino resultará insoportable”.

Denunció la falta de medidas de protección: “Katie Dolatowski ya se ha aprovechado del acceso a espacios femeninos para cometer agresiones sexuales. Es absolutamente inaceptable que a esta persona se le diera la misma oportunidad otra vez”.

Actualmente, los delincuentes masculinos violentos encarcelados en Escocia pueden ser alojados en prisiones de mujeres siempre que sean reconocidos como transgénero.

En octubre, el Servicio Penitenciario Escocés (SPS) confirmó que la mitad de los reclusos actuales que se identifican como transgénero solo comenzaron a hacerlo después de sus condenas.

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